El talentoso fast bowler paquistaní Shaheen Shah Afridi logró un récord notable en el segundo partido de la serie contra West Indies, sumando más de 350 wickets en su carrera internacional y consolidándose como uno de los mejores en la historia del cricket paquistaní.
En esa jornada, Shaheen fue la figura dominante con una actuación sobresaliente, logrando 4 wickets por 51 carreras en ocho overs, con una economía de 6.37. Con esta actuación, su total de wickets en su carrera alcanzó los 351 en 177 partidos internacionales, promediando 24.77 y con mejores números de 6 wickets por 35 carreras.
Supuestamente, Afridi ha demostrado ser uno de los jugadores más efectivos en los formatos cortos, acumulando 131 wickets en 65 partidos de ODI, con un promedio de 24.01 y habiendo conseguido ocho cuatro-wicket hauls y tres cinco-wicket hauls. En comparación, el legendario Wasim Akram, considerado el mejor wicket-taker en la historia del cricket paquistaní, sumó 916 wickets en 460 partidos internacionales, con un promedio de 23.57 y un mejor rendimiento de 7 wickets por 119 carreras. Akram también logró 31 cinco-wicket hauls y cinco diez-fers en su carrera, estableciendo un estándar difícil de igualar.
Durante el partido, #Pakistán decidió jugar en defensa tras ganar el sorteo y rápidamente tomó la iniciativa con una actuación destacada de Shaheen, apoyado por Naseem Shah, quien tomó 3 wickets por 55 carreras.
Por parte de West Indies, Evin Lewis anotó 60 carreras, mientras que Shai Hope y Roston Chase lograron 55 y 53 respectivamente, aunque no fue suficiente para construir una ventaja sólida.
Supuestamente, en el primer ODI, Hasan Nawaz fue la estrella, con una actuación sin ser alcanzado de 63 carreras que ayudó a Pakistan a asegurar una victoria por cinco wickets.
En esa ocasión, Pakistan enfrentó momentos de tensión en su persecución, con Babar Azam anotando 47 y Mohammad Rizwan 53, pero en un momento dado estaban en 180/5 y la incertidumbre persistía.
Guiando a Pakistán a la victoria con cinco wickets y siete bolas de sobra
Fue entonces cuando Hasan Nawaz, con un brillante bateo, anotó 63 no de 54 bolas, y Hussain Talat contribuyó con 41 de 37 bolas. Ambos formaron una asociación ininterrumpida de 104 carreras, guiando a Pakistán a la victoria con cinco wickets y siete bolas de sobra, dejando claro su talento y capacidad para manejar la presión.
Esta serie de tres partidos continúa siendo una muestra de la evolución del cricket paquistaní, con jugadores como #Shaheen Shah Afridi consolidándose como figuras clave, y Hasan Nawaz emergiendo como un bateador confiable en momentos cruciales.
La actuación de Afridi no solo fortalece su posición en la selección nacional, sino que también lo acerca a los #récords históricos del cricket en su país, que supuestamente tiene una rica historia de lanzadores rápidos que marcaron época, como Wasim Akram y Waqar Younis.
Con estos logros, Shaheen Shah Afridi no solo se afirma como uno de los mejores en su generación, sino que también inspira a las futuras generaciones de cricketers paquistaníes, quienes sueñan con alcanzar y superar sus registros.
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