La Asia Cup 2025 inicia en los Emiratos Árabes Unidos con un nuevo formato y grandes expectativas, enfrentando a las mejores selecciones del continente en una competencia que promete emociones y sorpresas.

Este torneo, que tradicionalmente se realiza cada dos años, regresa con una serie de novedades y un escenario renovado en los Emiratos Árabes Unidos, país que desde hace años se ha consolidado como una de las principales sedes para eventos deportivos internacionales.
La competencia inició el martes 9 de septiembre con el enfrentamiento entre Afganistán y Hong Kong, en un duelo que llamó la atención por la participación de países emergentes en el cricket asiático.
La organización ha dispuesto dos estadios principales para albergar los partidos: el Dubai International #Cricket Stadium en Dubái y el Sheikh Zayed International Cricket Stadium en Abu Dhabi, ambos con una capacidad para miles de espectadores y tecnología de punta que garantiza una experiencia de primera categoría.
Este año, la Asia Cup presenta un cambio significativo en su formato. Después de que en 2023 se celebrara en formato ODI (uno día internacional), en esta edición se ha optado por el formato T20, en sintonía con el próximo Campeonato del Mundo #T20 de la ICC programado para 2026.
La decisión busca potenciar la emoción y la rapidez de los partidos, además de atraer a una audiencia más joven y global.
Supuestamente, ocho equipos participan en la competición. India y Pakistán, archirrivales históricos, comparten el Grupo A junto con Omán y los Emiratos Árabes Unidos. En el Grupo B se encuentran Afganistán, Bangladés, Hong Kong y Sri Lanka. La presencia de estos países refleja la creciente popularidad del cricket en la región y la apuesta de la ICC por expandir el deporte en países donde aún está en desarrollo.
India, actual campeona del torneo y considerada una de las favoritas, llega con fuerza y con la esperanza de defender su título. La selección india, que en 2023 logró coronarse en la modalidad T20, busca consolidar su dominio en el continente. Presuntamente, la presencia de estrellas como Virat Kohli y Rohit Sharma será decisiva para sus aspiraciones.
Por otro lado, Sri Lanka, que fue la vencedora en la última edición en formato T20, también aspira a repetir el éxito, confiando en su sólida base de jugadores experimentados y jóvenes promesas.
La competencia se intensifica con la participación de Afganistán y Bangladés, quienes han mostrado avances significativos en los últimos años y quieren dejar huella en este torneo.
El formato de la fase de grupos establece que los dos mejores equipos de cada grupo avanzarán a la etapa de Super Cuartetos, donde todos se enfrentarán entre sí.
Los dos mejores de esta fase se medirán en la gran final, programada para el 28 de septiembre, en un enfrentamiento que definirá al nuevo campeón del continente.
En cuanto a la transmisión y la cobertura, la organización ha confirmado que la Copa de Asia 2025 será emitida en diferentes plataformas para garantizar el acceso a los fanáticos.
Sony Sports Network ha obtenido los derechos de transmisión y ofrecerá la cobertura en televisión por cable y plataformas DTH como Airtel Digital TV, TATA Play y Dish TV, además de su plataforma OTT JioHotstar.
Con una cobertura exclusiva en ciertos canales especializados en deportes
Supuestamente, la transmisión en vivo también estará disponible en España a través de plataformas digitales, con una cobertura exclusiva en ciertos canales especializados en deportes.
La cadena DD Sports también tendrá la opción de emitir algunos partidos, en concreto los de la selección india, para los usuarios de DD Free Dish y en su canal nacional.
La final, en particular, será transmitida en vivo en esta cadena, permitiendo que los espectadores en la India y en algunos países del sur de Asia puedan seguir la emocionante resolución del torneo.
Este evento no solo representa una oportunidad para que los equipos demuestren su talento, sino también un reflejo del crecimiento del cricket en la región.
La historia de la Asia Cup, que comenzó en 1984, ha sido testigo de la evolución del deporte en Asia, con países como India y Pakistán dominando en varias ediciones, aunque siempre con sorpresas y cambios de liderazgo.