La región de Cataluña ha puesto en marcha un operativo específico para prevenir incendios forestales durante la recolección de cereal, incluyendo recomendaciones y herramientas de evaluación del riesgo.
Para ello, se han implementado medidas preventivas y recomendaciones destinadas a reducir la probabilidad de incidentes durante la recolección.
Esta temporada, además de los protocolos habituales, se ha incorporado en los mapas de peligro de incendios forestales una referencia específica que guía las acciones preventivas en función del nivel de riesgo establecido para cada día.
Esto permite ajustar las labores agrícolas y adoptar medidas específicas en función de la evaluación del riesgo, favoreciendo una respuesta rápida y eficaz en caso de siniestro.
Entre las recomendaciones más importantes, se destaca la necesidad de reducir la velocidad de los tractores en terrenos irregulares, especialmente en áreas pedregosas o inclinadas, y de elevar la plataforma de corte para evitar la acumulación de material vegetal que pueda propiciar el inicio de un incendio.
Una vez finalizada la cosecha en un campo, se recomienda delimitar un perímetro labrado usando gradas o aperos similares para reducir las zonas susceptibles de prender fuego.
Además, se aconseja contar con medios de extinción adecuados, como al menos dos extintores de espuma con base de agua y una capacidad mínima de 5 kg cada uno.
Es esencial que toda la maquinaria agrícola esté en perfectas condiciones de funcionamiento y reciba un mantenimiento periódico para evitar fallos que puedan desencadenar incendios.
El operativo de vigilancia también cuenta con una distribución estratégica de efectivos en las comarcas de Lleida, como Garrigues, Segrià, Noguera, Urgell, y en Tarragona y Girona, incluyendo zonas como el Alt Empordà y Baix Empordà.
Además de la presencia en tierra, se moviliza un Grupo de Apoyo Aéreo para tareas de supervisión y respuesta rápida.
Una de las herramientas clave para la gestión del riesgo es el mapa diario de peligro de incendio forestal, que evalúa en tiempo real las condiciones de riesgo en las diferentes áreas y se actualiza diariamente.
Abarcando toda Cataluña
Además, se elaboran mapas de probabilidad de ignición para cada jornada durante las labores de cosecha, abarcando toda Cataluña. Estos mapas permiten a los agricultores y a las autoridades tomar decisiones informadas sobre cuándo y cómo realizar las tareas agrícolas, minimizando las posibilidades de que se produzcan incendios.
Históricamente, #Cataluña ha sido una de las regiones más afectadas por incendios forestales en el sur de Europa, con graves daños ambientales y económicos.
La inversión en estos operativos y en programas de sensibilización busca reducir la cantidad de incendios, que en temporadas pasadas han causado pérdidas que superaron los 300 millones de euros en diferentes años del siglo XXI.
La colaboración entre el gobierno, los agricultores y los cuerpos de emergencia es fundamental para mantener segura y sostenible la riqueza forestal y agrícola de la región.
