Los Agentes Rurales de Cataluña intensifican la supervisión de los espacios naturales en agosto con el fin de preservar la flora y fauna, así como garantizar la seguridad de los visitantes.

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En el mes de agosto, los Agentes Rurales de Cataluña han incrementado sus esfuerzos en la vigilancia de los espacios naturales, con el propósito de proteger tanto la flora como la fauna de la región.

Esta decisión busca no solo preservar la biodiversidad, sino también garantizar la seguridad de los visitantes y evitar que las actividades recreativas y turísticas afecten negativamente a las explotaciones agrícolas y ganaderas.

Para lograr estos objetivos, los Agentes Rurales han distribuido su personal en las áreas más frecuentadas por los turistas.

Entre sus principales tareas se encuentran la prevención de incendios forestales, la regulación del acceso a los espacios naturales de forma segura y controlada, y la supervisión de la acampada y el uso de vehículos motorizados.

En términos de resultados, entre el 1 de junio y el 31 de julio, se han llevado a cabo un total de 3.651 acciones de control, redundando en 486 denuncias.

Durante el año en curso, y solo hasta ahora, se han registrado 8.712 acciones de vigilancia, resultando en 827 denuncias, cifras que reflejan un aumento significativo en comparación con años anteriores.

Es fundamental que los visitantes conozcan lo que está permitido y lo que no.

Por ejemplo, está terminantemente prohibido utilizar fogones de gas y barbacoas en terrenos forestales y dentro de un radio de 500 metros alrededor de ellos.


Además, se insta a los visitantes a respetar la señalización existente, así como los campos de cultivo, y a cerrar los pasos ganaderos al atravesarlos.

También es esencial no circular con vehículos a motor fuera de las pistas, en senderos o por lechos de ríos.

Para asegurar una convivencia armónica con la fauna silvestre y el ganado, se recomienda llevar siempre a los perros atados, evitando así disturbios a otras personas y sus rebaños.

Asimismo, los visitantes deben ser conscientes de la velocidad permitida, que en pistas forestales no debe superar los 30 km/h.

El estacionamiento solo se deberá realizar en áreas habilitadas o en un costado de la pista, asegurando que no se obstaculice el paso de otros vehículos, incluidos aquellos de emergencia.

Otro aspecto esencial es el compromiso con la limpieza de los espacios naturales.

Todo visitante debe llevarse cualquier desperdicio que genere, contribuyendo así a conservar la belleza natural de la región.

Si se observa alguna acción irresponsable que ponga en riesgo el entorno, se debe contactar a los números de emergencia 935 617 000 o 112. Este esfuerzo no solo es una responsabilidad de los Agentes Rurales, sino de todos aquellos que desean disfrutar de la naturaleza en su estado más puro.