Con una inversión de 2,3 millones de euros, Cataluña busca mejorar la atención a personas dependientes y con discapacidad mediante la digitalización y simplificación de trámites.

Imagen relacionada de cataluna medidas dependencia disabilidad

Recientemente, la Generalitat de Cataluña ha presentado un ambicioso paquete de iniciativas dirigido a mejorar la gestión y el proceso de reconocimiento de la dependencia y la discapacidad.

Esta estrategia tiene como objetivo principal reducir el tiempo de espera para los solicitantes, así como facilitar el acceso a los servicios necesarios.

Para ello, se destinarán 2,3 millones de euros en un esfuerzo por modernizar y optimizar la atención ciudadana.

Una de las innovaciones más significativas es que ya no será necesario presentar informes médicos del sistema público de salud junto a la solicitud de dependencia.

Esto es posible gracias a la implementación del Visor Salud-Social, una herramienta que permite el acceso directo a la información sanitaria relevante, que ya está en funcionamiento.

Esta medida se acompaña de la simplificación de los formularios online, que ahora serán más intuitivos y con carga automática, lo que permitirá reducir la cantidad de trámites en papel, minimizar errores y acortar los plazos de respuesta.

Otra de las novedades es la creación de un nuevo simulador para la valoración del grado de dependencia, el cual estará disponible para los potenciales beneficiarios.

Además, se introducirá una calculadora inteligente única que facilitará el cálculo de los costos y copagos vinculados al Programa Individual de Atención (PIA), asegurando una mayor claridad y transparencias a los usuarios.


Las medidas no solo se centran en la digitalización, sino que también buscan reforzar los equipos de profesionales que realizan valoraciones. Se contempla la mejora de las condiciones laborales de estos trabajadores y la incorporación de nuevos perfiles profesionales, lo que a su vez tiene como objetivo aumentar la eficacia del sistema.

Esto incluye la introducción de un triaje previo en las valoraciones de discapacidad, así como la posibilidad de realizar valoraciones sin la necesidad de una visita en determinados casos específicos.

El contexto que motiva estas medidas es alarmante: el número de solicitudes de valoración de dependencia ha crecido espectacularmente en la última década, pasando de 65,000 en 2014 a más de 120,000 en 2023.

En el ámbito de la discapacidad, las cifras también son alarmantes, con un aumento de solicitudes anuales de valoración que han pasado de 80,000 en 2014 a casi 150,000 en el presente año.

Este crecimiento inusitado demanda una respuesta ágil y eficaz por parte de las instituciones, lo que ha llevado a la Generalitat a impulsar estas reformas.

Con esta serie de iniciativas, Cataluña no solo se adapta a una mayor demanda de servicios, sino que también se posiciona como un referente en la modernización de los procesos de atención a la diversidad funcional y dependencia, dando un paso hacia un sistema más inclusivo y accesible.