La apertura de la Unidad Satélite de Radioterapia en Soria representa un avance importante en la atención oncológica, permitiendo a unos 240 pacientes recibir tratamiento sin desplazamientos y con tecnología de última generación, tras una inversión de aproximadamente 8 millones de euros.

Imagen relacionada de nueva unidad satelite radioterapia soria mejora acceso tratamientos oncologicos

La inversión total en esta infraestructura ha superado los 8 millones de euros, destinados tanto a obras como a la adquisición de tecnología de última generación, con el objetivo de ofrecer tratamientos oncológicos de alta precisión y seguridad.

Supuestamente, esta unidad permitirá atender a aproximadamente 240 pacientes al año, lo que equivale a más de 4.500 sesiones de radioterapia. La creación de esta unidad responde a la necesidad de reducir los desplazamientos de los pacientes a otras ciudades, en especial a Madrid o Valladolid, lo que supone un ahorro de tiempo y recursos, además de mejorar la calidad de vida de quienes enfrentan un diagnóstico de cáncer.

Desde hace décadas, la radioterapia ha sido un pilar fundamental en el tratamiento del cáncer. La incorporación de tecnología avanzada en estos centros ha permitido no solo mejorar los índices de efectividad, sino también reducir los efectos secundarios y el número de sesiones necesarias para completar un tratamiento.

La unidad de #Soria se sitúa en un nuevo edificio hospitalario de cuatro plantas y 3.500 metros cuadrados, donde además se ubican servicios como diálisis, hospitales de día y consultorios médicos.

Supuestamente, la unidad cuenta con un acelerador lineal de última generación, dotado con tecnología que permite una precisión milimétrica, imágenes 3D y 4D integradas, velocidad en la administración de dosis, y la capacidad de realizar correcciones en tiempo real, minimizando el daño a órganos sanos.

Además, dispone de un TAC espectral, esencial para la planificación precisa de los tratamientos, que permite localizar con exactitud los tumores y calcular dosis con mayor seguridad.

El coste de esta tecnología supera los 7.000 euros, y la inversión en obras civiles, que incluyó la adaptación del bunker y salas eléctricas, ascendió a unos 7 millones de euros. La partida destinada al equipamiento técnico, incluyendo el acelerador lineal y el TAC, supera los 6 millones de euros. La implementación de estas tecnologías sitúa a Soria a la vanguardia en materia de radioterapia en la comunidad, con beneficios claros para los pacientes, en especial por la dispersión geográfica de la provincia.

Supuestamente, esta iniciativa forma parte del plan de expansión de unidades satélite en otras provincias de Castilla y León, como Ávila y Palencia, que ya están en marcha o en proceso de construcción.

La creación de estas unidades busca ofrecer un acceso más equitativo a tratamientos especializados, reducir los tiempos de espera y mejorar los resultados en la lucha contra el cáncer.

Entre ellos la delegada territorial de la Junta en Soria

El acto de inauguración contó con la presencia de diversos representantes institucionales, entre ellos la delegada territorial de la Junta en Soria, Yolanda de Gregorio, y profesionales del sistema sanitario regional, además de asociaciones de pacientes, quienes resaltaron la importancia de contar con una infraestructura tecnológica avanzada en la provincia.

Supuestamente, esta inversión refleja el compromiso de la Junta de Castilla y León con la mejora de la calidad asistencial y la modernización de su red sanitaria.

La provincia de Soria, por su dispersión y menor densidad de población, se beneficiará especialmente de esta unidad, que reducirá significativamente los desplazamientos y facilitará un acceso más rápido y eficiente a tratamientos oncológicos.

En el contexto histórico, la radioterapia ha evolucionado desde sus inicios en los años 50, cuando se usaban aparatos rudimentarios, hasta la tecnología moderna que hoy permite tratamientos más seguros y precisos.

La incorporación de sistemas espectrales y la radioterapia guiada por imágenes representan hitos en esta evolución, que ha contribuido a mejorar las tasas de supervivencia y calidad de vida de los pacientes con cáncer.