La reintroducción del lince ibérico en El Cerrato palentino da un paso crucial con la liberación de dos nuevos ejemplares
Hoy se ha dado un importante avance en el proyecto de reintroducción del lince ibérico en El Cerrato palentino. El consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, junto a otros funcionarios, ha liberado dos ejemplares más, denominados Villano y Viñegra, un macho y una hembra provenientes de los centros de cría de Zarza de Granadilla y El Acebuche.
Con esta liberación, ya son cuatro los linces que han sido reintroducidos en esta zona de Castilla y León, y se espera que en las próximas semanas se sumen otros dos ejemplares, alcanzando así la meta de seis linces para el año 2025.
Los nuevos protagonistas de esta historia, Villano y Viñegra, se unen a Virgo y Vuelvepiedras, quienes fueron liberados el pasado 17 de febrero tras un mes de aclimatación en un cercón de presuelta.
Durante su primera semana en libertad, se ha llevado a cabo un seguimiento exhaustivo por parte de los agentes medioambientales, quienes han constatado que los linces se están adaptando adecuadamente a su nuevo hábitat.
Es crucial que la comunidad local colabore en este proceso, evitando molestias que puedan llevar a la dispersión de los animales.
El proyecto de reintroducción no solo busca devolver al lince ibérico a su hábitat natural, sino que también implica la mejora de las condiciones del entorno.
La Junta de Castilla y León está trabajando en coordinación con propietarios de fincas y cotos de caza para implementar mejoras en el hábitat, como la construcción de charcas de entre 10,000 y 15,000 litros, que son vitales tanto para los linces como para la fauna silvestre.
Además, se están realizando otras mejoras como arreglos en cercas y la creación de bebederos, que también beneficiarán a las especies de caza menor.
Este esfuerzo forma parte de un programa más amplio que se ha estado gestando durante más de dos años, basado en estudios técnicos y consultas públicas.
Se ha verificado que el área de El Cerrato presenta una abundancia de conejos adecuada para la alimentación de los linces, lo que hace viable la reintroducción.
La aceptación social ha sido notable, con un 93% de apoyo entre los encuestados, lo que refleja un fuerte compromiso de la comunidad con la conservación de esta especie en peligro de extinción.
Históricamente, el lince ibérico ha sido un símbolo de la biodiversidad en la península ibérica, pero su población ha disminuido drásticamente a lo largo de las décadas.
La reintroducción en El Cerrato palentino marca un hito significativo, ya que es la primera área de reintroducción en la mitad norte de la península, aproximadamente medio siglo después de su desaparición en la meseta castellana.
Este proyecto no solo es un esfuerzo por recuperar una especie emblemática, sino que también busca fomentar un ecosistema más equilibrado y saludable en la región, beneficiando a toda la fauna silvestre.
La colaboración de todos es esencial para asegurar el éxito de esta iniciativa y garantizar un futuro sostenible para el lince ibérico en El Cerrato.
