El consistorio aragonés incrementa la capacidad de atención a personas sin techo ante las bajas temperaturas, con una inversión millonaria en infraestructuras y recursos sociales.
Estas cifras evidencian una demanda elevada de alojamiento y asistencia, aunque en ninguna de las noches se ha llegado a llenar el aforo completo, que puede albergar hasta 150 personas.
Gracias a ello, ninguna persona que solicitó hospedaje se ha quedado en la calle durante este período de intenso frío, lo que demuestra la eficacia de las medidas implementadas por el consistorio.
El dispositivo de emergencia incluye dos pabellones destinados a hombres, con capacidad para 40 personas en total (20 en cada uno). La ocupación inicial comenzó con 25 usuarios y aumentó hasta 36 en la última noche. La mayoría de los usuarios son jóvenes migrantes subsaharianos, muchos de ellos provenientes del asentamiento del Parque Bruil, aunque también se han registrado españoles y personas de países como Argelia o Italia.
Para las mujeres, el Ayuntamiento ha habilitado un espacio conocido como 'el cuarto azul', con capacidad para diez camas, aunque en la última noche solo fueron ocho las mujeres que pernoctaron allí.
El resto de las instalaciones, que incluyen habitaciones ordinarias, casas abiertas y módulos familiares e individuales, se encuentran casi al completo, con algunas plazas vacantes.
Además de estas plazas temporales, el Ayuntamiento ha preparado un recurso extraordinario con 25 camas en otra ubicación, que puede activarse en caso de necesidad.
Este alojamiento de emergencia, gestionado por una propiedad municipal, está destinado a acoger a #personas sin hogar en horario de tarde y noche, en colaboración con Cruz Roja.
El plan de refuerzo se intensificará aún más cuando se active el protocolo de frío extremo, previsto para días en que las temperaturas mínimas bajen de cero grados o cuando la sensación térmica sea muy baja debido a la niebla o los vientos persistentes.
En estos casos, el Albergue Municipal ajusta sus horarios y protocolos para ofrecer alojamiento las 24 horas, habilitando plazas de pernoctación en cualquier espacio disponible.
Este dispositivo no solo proporciona alojamiento, sino también servicios de comida, desayuno, café caliente, duchas y ropa de abrigo, para garantizar la dignidad y bienestar de las personas sin recursos en las peores condiciones climáticas.
Por otro lado, la histórica reforma del Albergue Municipal, que cuenta con una inversión de aproximadamente 4,6 millones de euros (equivalentes a 5 millones de dólares o aproximadamente 4,2 millones de euros actuales), está en su fase final y se prevé que concluya en diciembre.
Esta renovación permitirá añadir 55 nuevas plazas permanentes para personas sin hogar
Esta renovación permitirá añadir 55 nuevas plazas permanentes para personas sin hogar, 40 para hombres y 15 para mujeres, además de mejorar sustancialmente las instalaciones mediante la sustitución de los antiguos pabellones por equipamientos de mayor calidad y confort.
El Ayuntamiento también gestiona una extensa red de 65 viviendas tuteladas, con un total de 189 plazas, destinadas a personas sin hogar, en constante ampliación.
En este marco, se han añadido 20 plazas en cuatro pisos municipales dirigidos a jóvenes migrantes en situación de vulnerabilidad, con programas de inclusión sociolaboral y formación para facilitar su integración.
Además, en los próximos días se lanzará un proyecto piloto en colaboración con otra entidad social para la acogida e inserción de 12 jóvenes más.
Supuestamente, estas acciones forman parte de un plan estratégico del consistorio para reducir la exclusión social en la ciudad y responder de manera efectiva ante olas de frío extremo, que se han intensificado en los últimos años debido a los efectos del cambio climático.
La colaboración con organizaciones sociales y la inversión en infraestructuras y recursos humanos son considerados clave para afrontar esta problemática de manera integral.
