La ciudad de Zaragoza establece un nuevo refugio dedicado a reptiles exóticos, en respuesta al incremento de animales abandonados y la falta de espacios adecuados para su protección. La iniciativa busca concienciar sobre la importancia de la tenencia responsable y la conservación de la biodiversidad local.
Este espacio, que ya acoge varias especies, surge como respuesta a la necesidad de ofrecer un refugio adecuado para #reptiles que, por diversas razones, terminan en la vía pública o en entornos no adecuados para su bienestar.
Supuestamente, en la ciudad existían ya centros de #protección animal para perros y gatos, así como para especies autóctonas en centros especializados como el de la Alfranca, gestionado por el Gobierno de Aragón.
Sin embargo, hasta ahora, no había un espacio dedicado específicamente a reptiles exóticos, como serpientes, lagartos y tortugas, que representan un porcentaje cada vez mayor en los casos de animales abandonados.
El nuevo santuario ha sido posible gracias a una colaboración estrecha entre el Ayuntamiento de #Zaragoza y la Fundación Acuario de Zaragoza, una organización comprometida con la #biodiversidad y la #conservación de especies.
La inversión total para su construcción y puesta en marcha fue de aproximadamente 15.000 euros, distribuidos con 10.000 euros aportados por el ayuntamiento y otros 5.000 por la Fundación. La infraestructura, ubicada en una zona adecuada para la rehabilitación y conservación de especies, ya alberga a nueve serpientes, cuatro lagartos y unas treinta tortugas.
Supuestamente, entre los reptiles más frecuentes en el santuario se encuentran pitones reales, dragones barbudos y diferentes tipos de tortugas acuáticas, muchas de ellas rescatadas tras ser abandonadas por sus dueños.
La situación no es ajena a otras urbes europeas, donde el incremento de la tenencia de #animales exóticos ha llevado a un aumento en los casos de abandonos y a la necesidad de crear espacios específicos para su cuidado.
La historia de estos animales refleja un problema global que, en algunos países, ha sido agravado por la popularidad de ciertas especies en el mercado de mascotas.
La consejera Gaudes expresó su satisfacción por la iniciativa, destacando que “gracias a esta colaboración con el Acuario y su Fundación, podremos ofrecer una segunda oportunidad a animales que de otra forma estarían en peligro o en condiciones insalubres”.
Además, recordó que es fundamental que quienes deseen tener una mascota sean conscientes de la responsabilidad que implica su cuidado, especialmente en el caso de especies exóticas que requieren condiciones específicas y atención especializada.
Supuestamente, varias investigaciones muestran que la introducción accidental o intencionada de especies exóticas en hábitats naturales puede tener consecuencias devastadoras.
La liberación de reptiles en entornos como el río Gállego
La liberación de reptiles en entornos como el río Gállego, por ejemplo, podría afectar la fauna autóctona y alterar los ecosistemas locales. La introducción de especies invasoras es considerada la segunda causa principal de pérdida de biodiversidad en Europa, solo después de la destrucción de hábitats.
El santuario también pretende sensibilizar a la población sobre la importancia de la adopción responsable y el abandono cero. La iniciativa forma parte de un plan más amplio para promover la conservación de especies en peligro y reducir la comercialización ilegal de animales exóticos en el mercado de mascotas.
En este sentido, la colaboración entre el ayuntamiento y la Fundación Acuario busca también reforzar la protección del galápago europeo, especie que se sigue introduciendo en su entorno natural, particularmente en el río Gállego, con la intención de fortalecer las poblaciones autóctonas.
