El Ayuntamiento de Zaragoza presenta un ambicioso proyecto de reforma que incluirá más de 15.000 m² de áreas verdes y accesibles, con una inversión estimada en más de 9 millones de euros.
En el corazón de Zaragoza, el Coso se prepara para experimentar una significativa transformación que lo convertirá en la extensión natural del Paseo Independencia.
Este nuevo eje verde, que será predominantemente peatonal, guiará a los transeúntes hacia una renovada Plaza de San Miguel, que contará con amplias áreas verdes y espacios de convivencia.
La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, presentó recientemente las directrices de este ambicioso proyecto junto al consejero de Urbanismo, Infraestructuras, Energía y Vivienda, Víctor Serrano.
Chueca enfatizó que el propósito es 'mejorar uno de los ejes fundamentales del Casco Histórico y el Centro, transformándolo en un entorno más amigable para los habitantes de la ciudad y sus visitantes.
Buscamos incorporar más vegetación, lo que fomentará un ambiente propicio para pasear y disfrutar de la riqueza arquitectónica de la zona'.
Este proyecto, que incluye una inversión que podría superar los 9 millones de euros, abarcará la reforma integral de más de 500 metros del Casco Histórico y 15.700 metros cuadrados de superficie.
La duración estimada de esta obra es de aproximadamente un año y medio.
El Coso, una calle con un diseño irregular que va desde los 30 metros de ancho junto a Plaza de España hasta los 17,6 metros en su sección más estrecha, tendrá un espacio significativamente ampliado para los peatones, incluyendo aceras de ancho variable.
Además, se prevé la creación de un corredor verde repleto de árboles y parterres, donde se instalarán bancos y fuentes en las áreas más anchas de la calle, proponiendo nuevos espacios donde los ciudadanos puedan descansar y disfrutar de su entorno.
La nueva Plaza de San Miguel se diseñará para eliminar las isletas actuales y reconfigurar la calzada, generando un espacio público más amplio y acogedor para la comunidad.
En este nuevo diseño se incluirá arbolado, zonas verdes y un área destinada a un pequeño juego, siempre contando con la participación vecinal para asegurar que el espacio cumpla con las expectativas de los ciudadanos.
A lo largo de la calle San Miguel, se establecerá una plataforma única que conectará con la zona ya reformada de la calle, llevándose a cabo de manera que los ciudadanos puedan disfrutar de una cohesión estética.
El nuevo diseño del Coso se alineará con el Paseo Independencia, utilizando materiales similares como el granito, y contará con dos carriles de circulación.
El carril bici será ensanchado y mantendrá su trayecto a lo largo de la acera norte para incrementar la seguridad de los ciclistas.
Para garantizar una adecuada movilidad durante el desarrollo de estas obras, se implementará un carril bus que facilitará el transporte público desde la ribera del Ebro en dirección hacia el Coso Bajo.
Finalmente, esta reforma integral incluye importantes trabajos en el subsuelo, donde se procederá a sustituir viejas tuberías que han presentado problemas de funcionamiento en los últimos años.
La red de suministro de agua potable y el sistema de saneamiento sufrirán renovaciones significativas, además del alumbrado público que se modernizará con tecnología LED, promoviendo así un uso más eficiente de la energía.