La Junta Central Fallera lanza un concurso público para elegir a los indumentaristas oficiales de las falleras mayores y sus cortes de honor en 2026, con un presupuesto de aproximadamente 125.000 euros y una serie de lotes que incluyen telas, complementos y calzado tradicional.

La Junta Central Fallera (JCF) ha iniciado el proceso para seleccionar a los profesionales y empresas que vestirán a las falleras mayores de Valencia y a sus cortes de honor en las celebraciones de 2026.

Este proceso, que busca mantener la tradición y la calidad en la vestimenta oficial de la fiesta, cuenta con un presupuesto de aproximadamente 125.000 euros, que en euros actuales equivale a unos 125.000 euros, destinado a diferentes lotes que abarcan desde la confección de telas hasta la provisión de accesorios y calzado.

Este concurso público se enmarca en una tradición que se remonta a la historia de las Fallas, donde la indumentaria típica valenciana ha sido un símbolo de identidad y cultura.

La elección de los indumentaristas oficiales busca también valorar y promover el trabajo artesanal, que ha sido una parte fundamental de la economía y la cultura valenciana durante siglos.

La convocatoria, abierta a empresas y profesionales acreditados en la Comunidad Valenciana, pretende garantizar que las prendas sean de la más alta calidad y fidelidad a la vestimenta tradicional.

El contrato se dividirá en 12 lotes, cada uno destinado a diferentes productos y servicios. El primer y segundo lote, con un presupuesto de aproximadamente 14.644 euros cada uno, se enfocan en la confección de los trajes oficiales de la fallera mayor y su corte, así como de la fallera mayor infantil y sus respectivas cortes de honor.

Estos trajes, considerados símbolos de la fiesta, deben ser elaborados con telas de seda certificada por la marca 'Seda Valencia'. La uniformidad y el diseño, que deben respetar el patrón tradicional, son requisitos imprescindibles, y las telas deberán presentar un mismo estilo, con variaciones en los colores o en los detalles, para las diferentes parejas de las cortes.

La elección de los colores y el diseño será coordinada con las empresas seleccionadas, que deberán ofrecer al menos 10 opciones de colores para la confección.

La entrega de las prendas está prevista para la primera quincena de octubre para el segundo traje oficial y la segunda quincena del mismo mes para el primer traje oficial.

Otros lotes incluyen el suministro de manteletas, con un presupuesto cercano a los 8.722 euros, y calzado tradicional para las falleras, con un fondo de aproximadamente 6.292 euros. El calzado será de estilo clásico para los primeros trajes y de corte más moderno para los segundos, siempre respetando las formas tradicionales valencianas.

Asimismo, la confección de los trajes oficiales de las falleras mayores y sus cortes de honor, tanto de la versión adulta como infantil, se adjudicará en lotes que oscilan entre los 12.463 y los 13.936 euros, con fechas de entrega hasta enero de 2026. Estos trajes, que deben reflejar la riqueza y la belleza de la indumentaria valenciana, incluyen detalles complejos como corpiños, jubones y mantillas, realizadas con materiales nobles y técnicas artesanales.

Complementariamente, la posticería, que incluye el uso de pelo natural y mantenimiento, tendrá un presupuesto de unos 4.561 euros, mientras que las peinetas, piezas emblemáticas en la indumentaria valenciana, se valoran en aproximadamente 8.494 euros, elaboradas con materiales de alta calidad y siguiendo técnicas tradicionales.

Finalmente, las mantillas, elemento esencial en los actos de protocolo, se adjudicarán con un presupuesto de unos 4.356 euros. Las propuestas deberán respetar los patrones históricos y tradicionales, utilizando materiales artesanales que aseguren la autenticidad de cada pieza.

Este proceso de licitación refleja la importancia que la ciudad de Valencia otorga a su cultura y tradiciones, buscando que las prendas que vestirán sus máximas representantes en los actos oficiales sean de la mejor calidad y reflejen la historia y el arte de la indumentaria valenciana.

La iniciativa también busca potenciar a los artesanos y empresas locales, que durante generaciones han mantenido viva esta tradición, ayudando a preservar un patrimonio cultural que forma parte esencial de la identidad valenciana.