El gobierno argentino presenta cambios en el impuesto a los autos, eliminando aranceles para vehículos híbridos y eléctricos, potenciando un nuevo mercado para estos modelos.
El gobierno argentino ha implementado modificaciones significativas en la legislación fiscal que impactan directamente en el sector automotriz, especialmente en la importación de vehículos híbridos y eléctricos.
Estas reformas, comunicadas por el ministro de Economía, Luis Caputo, incluyen la eliminación de la primera escala del impuesto al lujo, que corresponde a un 20% aplicado a autos con precios de lista entre 41 y 75 millones de pesos.
Además, la alícuota de la segunda escala ha sido reducida al 18%, bajando de un 35% anterior.
Como resultado de estas medidas, se estima que los precios de los vehículos disminuirán entre un 15% y un 20%. Las primeras marcas en reaccionar ante este anuncio han sido Ford y BAIC, que ya han anticipado rebajas de precios que alcanzan hasta el 18% y el 15%, respectivamente.
Se espera que otros fabricantes comiencen a actualizar sus listas de precios en los próximos días, lo que ha generado una recepción positiva en todo el sector automotriz.
Simultáneamente, el gobierno ha fijado nuevos requisitos para la importación de vehículos sostenibles, que permitirá la llegada sin aranceles de modelos híbridos y eléctricos cuyo valor FOB (Free On Board) no supere los 15.000 euros.
Este ajuste es una estrategia para fomentar el uso de energías alternativas en el mercado automovilístico argentino, que ha visto un crecimiento en las ventas de autos eléctricos en el último año.
El modelo con un FOB de 15.000 euros podría acabar costando entre 25 y 30 millones de pesos en el mercado local, lo que supondría una disminución considerable de costos.
Hasta la actualidad, todo vehículo importado fuera de los acuerdos de comercio libre tiene un arancel que puede llegar hasta el 35%, lo que encarece notablemente los precios de estos autos.
Con este nuevo escenario, se prevé que más modelos como el BAIC BJ30 y el BAIC EU5 puedan ingresar en condiciones ventajosas, convirtiéndose en opciones atractivas para los consumidores.
El gobierno ha definido un cupo de 50.000 unidades que se beneficiarán con la eliminación de aranceles, una cifra considerable que triplica la cantidad de autos electrificados que llegaron al mercado argentino el año anterior.
El impacto esperado es del 10% del mercado total proyectado para este año.
Los tipos de autos que se beneficiarán de esta normativa comprenden modelos con tecnología alternativa, tales como los vehículos híbridos, eléctricos, y de hidrógeno.
Sin embargo, quedan fuera del programa aquellos vehículos con peso inferior a 400 kilos y que no cumplan con ciertos requisitos de potencia y autonomía.
Este cambio también podría abrir las puertas a un incremento en la oferta de autos procedentes de China, donde la venta de modelos híbridos y eléctricos ha crecido exponencialmente.
En comparación con 12,8 millones de unidades vendidas en el gigante asiático el año pasado, Argentina ha sido un mercado que ha tardado en adoptar estas tecnologías.
La implementación de estas políticas podría señalar el inicio de una nueva era para los autos provenientes de China, un país que ha logrado producir vehículos a precios muy competitivos en comparación con los fabricantes europeos, japoneses y estadounidenses.
Hugo Belcastro, importador de BAIC en Argentina, se mostró optimista ante la posibilidad de un aumento en la llegada de modelos híbridos y eléctricos: 'Es un buen comienzo', afirmó.
En conclusión, las reformas fiscales implementadas por el gobierno argentino buscan no solo revitalizar el sector automotriz, sino también fomentar una transición hacia un futuro más sostenible en cuanto a la movilidad, priorizando la tecnología que minimiza el impacto ambiental.