Análisis sobre la presencia de autos chinos en Argentina, su cuota de mercado, las principales marcas involucradas y los desafíos de repuestos y servicio postventa que persisten.
La pregunta sobre la viabilidad de los autos chinos dejó de ser un tema marginal y hoy es parte de la conversación cotidiana de compradores potenciales.
Por precio, equipamiento, diseño, tecnología y mecánica, estas marcas han pasado a competir en pie de igualdad con las propuestas tradicionales, aunque todavía se advierten diferencias en el respaldo de postventa y en la disponibilidad de repuestos frente a las marcas generalistas.
Las dudas habituales persisten: ¿qué pasa con los repuestos?, ¿cuál es el valor de reventa y qué ocurrirá si el dólar se dispara y se complica el acceso al mercado?\n\nEl panorama de las importaciones de autos chinos en Argentina muestra un crecimiento concreto en los últimos años, con un dato relevante para 2025: entre enero y noviembre se patentaron 42.039 vehículos de origen chino, lo que equivale a alrededor del 10,23% del mercado local. Este volumen permite anticipar un incremento en 2026, con la llegada de nuevas marcas y modelos, como Leapmotor y Arcfox, respaldadas por beneficios arancelarios para vehículos electrificados.
Aun así, el peso de estas importaciones se compara con una participación menor si se analizan solo las ventas de las empresas importadoras, que concentra CIDOA, que arroja cifras cercanas al 9% del mercado.
El resto corresponde a la producción local de los ensambladores argentinos.\n\nEn el mapa actual de marcas chinas operando en el país, unas 20 firmas distintas participan a través de importadores o filiales, destacando BYD como la única que opera como filial y que lidera en ventas de vehículos electrificados a nivel global.
BYD llegó en octubre en un contexto de desembarco de otras marcas como Tank o MG, y de renovación de nombres ya conocidos como Chery, JAC o Geely, aprovechando beneficios oficiales para la importación de autos electrificados sin arancel aduanero.\n\nEntre las historias de 2025 se destacan varias marcas y modelos. En el grupo de llegada y establecimiento, BAIC figura como una de las opciones que mayor notoriedad ha obtenido con un volumen significativo de ventas; sin embargo, BYD permanece como el caso más visible al operar como filial directa y a la vez por su portafolio de vehículos electrificados.
En la dinámica de ventas, el modelo chino con mayor cantidad de patentes en 2025 fue el Territory de Ford, con 13.241 unidades, representando una cuota importante del volumen que llega desde China. En el conjunto de importadoras que concentra CIDOA, la participación total es menor, lo que señala una concentración más fuerte de la producción en ADEFA y en talleres de posventa propia.\n\nDurante 2025 se presentaron novedades interesantes en la oferta china. Maxus ofreció opciones de combustión y eléctricos, destacando pickup 100% eléctrica, mientras Tank y Ora presentaron versiones orientadas al off road y al segmento de hatchback urbano, respectivamente.
Tank 300 se posiciona como un todoterreno pensado para uso extremo, y Ora 03 entra como un hatchback compacto con motor 100% eléctrico. Por su parte, JMEV sumó el Easy 3, un auto compacto que se posiciona como una de las alternativas eléctricas más asequibles para el país.\n\nLa presencia china en Argentina implica un puñado de retos históricos y actuales. Aunque el costo de adquisición puede ser atractivo frente a otros mercados, la dependencia de componentes extranjeros, la disponibilidad de repuestos y la red de servicio técnico siguen siendo variables que influyen en la decisión de compra.
La industria ha visto avances en la cadena de suministro local y en acuerdos con ensambladoras para acortar tiempos de entrega, pero la experiencia de posventa varía según la marca y la red.
A nivel macro, Argentina ha mantenido una relación comercial estrecha con Brasil como fuente principal de importaciones automotrices, con México ocupando un lugar menor en el flujo de vehículos.
Esto condiciona la logística, los costos y la disponibilidad de repuestos para los usuarios finales.\n\nA modo de contexto histórico, la región ha observado un cambio gradual en la preferencia por modelos electrificados y una apertura regulatoria que favorece la importación de vehículos con alta eficiencia energética.
La llegada de BYD y otras marcas chinas ha acelerado la competitividad de opciones electrificadas, lo que genera presión sobre las marcas tradicionales para mejorar la oferta, el servicio y las garantías.
Aunque la penetración china ha ido aumentando, la cuota de mercado total y la resiliencia de la red de posventa dependen de las políticas públicas, de acuerdos económicos con otros países y de la capacidad de las terminales para mantener inventarios y repuestos disponibles.\n\nEn síntesis, el impulso de los autos chinos en Argentina se consolida como una realidad con crecimiento sostenido y una oferta cada vez más diversificada.
Los próximos años podrían ampliar la presencia de modelos eléctricos y reducir ciertas brechas históricas en servicios y repuestos, siempre que se mantengan incentivos adecuados y una coordinación eficiente entre importadores, fabricantes y redes de servicio técnico.
Mientras tanto, el consumidor debe sopesar la ecuación entre precio y soporte de posventa, entendiendo que el mercado se encuentra en una fase de transición que, por su naturaleza, añade tanto oportunidades como incertidumbres.\n