El Papa Francisco falleció a los 88 años en su residencia en el Vaticano tras meses de problemas respiratorios. Se abren las especulaciones sobre quién podría reemplazarlo en el liderazgo de la Iglesia Católica.

El Vaticano ha confirmado oficialmente la muerte del Papa Francisco, quien falleció este lunes a la edad de 88 años. La noticia fue comunicada por la Santa Sede tras el análisis del parte médico y la constatación del fallecimiento en su residencia habitual, la Casa Santa Marta, ubicada dentro del Vaticano.

La pérdida de uno de los líderes más influyentes en la historia moderna de la Iglesia Católica ha generado un gran impacto en millones de fieles en todo el mundo.

El Papa Francisco, nacido como Jorge Mario Bergoglio en Buenos Aires, Argentina, sirvió como pontífice desde marzo de 2013. Durante su pontificado, fue conocido por su enfoque pastoral, su defensa de los derechos humanos, la lucha contra la pobreza y su llamado a la misericordia y la justicia social.

Sin embargo, en los últimos meses, su salud se vio gravemente afectada por problemas respiratorios que lo mantuvieron hospitalizado durante 38 días en Roma, en un esfuerzo por estabilizar su condición.

Este deceso marca el fin de una era en la que el Papa Francisco rompió diversos esquemas tradicionales, promoviendo un cambio en la percepción del papado y enfrentándose a temas polémicos como la pobreza, el cambio climático y los derechos de las minorías.

A lo largo de su liderazgo, logró consolidar una imagen cercana y accesible, rompiendo con algunos formalismos históricos del Vaticano.

Con su fallecimiento, el proceso de elección de un nuevo Papa comenzará en las próximas semanas. La Iglesia Católica ya empieza a analizar quién podría sucederle en el máximo cargo. Entre los nombres que suenan con más fuerza en las casas de apuestas y en las especulaciones periodísticas se encuentran figuras de diferentes países y trayectorias dentro de la curia romana.

Entre los posibles sucesores se encuentra Matteo Zuppi, arzobispo de 69 años de Italia, considerado un figura moderada y con experiencia en diálogos interreligiosos.

También se menciona a Robert Sarah, ex prefecto de la Congregación para el Culto Divino, de 79 años, originario de Guinea, reconocido por su postura conservadora.

Desde Filipinas, el cardenal Luis Tagle, de 67 años, ha sido destacado por su trabajo social y su cercanía con las comunidades pobres. Otro nombre que ha surgido es el de Malcolm Ranjith, de Sri Lanka, de 77 años, quien ha liderado esfuerzos por mantener la unidad en su país tras conflictos religiosos.

En el ámbito europeo, Pietro Parolin, actual Secretario de Estado y de 70 años, es considerado un candidato fuerte debido a su experiencia administrativa y diplomática.

También se mencionan figuras menos conocidas, como Pierbattista Pizzaballa, de 59 años, y Péter Erdö, de Hungría, de 72 años, quienes representan diferentes corrientes dentro de la Iglesia.

La elección del próximo Papa será un momento crucial para la Iglesia Católica, que busca mantener su relevancia en un mundo en constante cambio. La historia ha demostrado que, en momentos de transición, la comunidad global observa con atención quién será el nuevo líder espiritual de más de mil millones de fieles en todo el planeta.

La tradición del cónclave y la elección del Papa continúa siendo uno de los eventos más importantes en la política religiosa mundial.