Una joven de 26 años fue asesinada a tiros en su lugar de trabajo en Ciudad Bolívar por su expareja, un policía activo que posteriormente se suicidó. El incidente evidencia la alarmante violencia de género en Colombia.

Un trágico femicidio ocurrió en la localidad de Ciudad Bolívar, en el sur de Bogotá, donde una joven de 26 años perdió la vida en un acto de violencia extrema.

La víctima, Yesika Paola Chávez Bocanegra, fue asesinada a tiros en su lugar de trabajo, una peluquería, por su expareja, un oficial activo de la Policía Nacional.

La escena, grabada por las cámaras de seguridad del establecimiento, muestra cómo el atacante, sin mediar palabra, saca un arma de su chaqueta y comienza a disparar en varias ocasiones hacia Yesika, gastando aproximadamente un cartucho y medio de balas.

Tras el ataque, el agresor se dirige hacia su propia cabeza y se dispara, terminando con su vida en el acto.

Este hecho desgarrador ha conmocionado a la comunidad y ha reavivado el debate sobre la violencia de género en Colombia, un país que en los últimos años ha visto un incremento en los casos de feminicidio.

La víctima, Yesika, era madre de dos hijos y había denunciado en varias ocasiones conductas violentas por parte de su expareja, Julián Meza Ramírez, de 36 años, quien además contaba con antecedentes de violencia física y psicológica contra ella y sus hijos.

La relación entre ambos había sido problemática y marcada por episodios de agresión, según informes de las autoridades.

El asesino, que en ese momento portaba un arma de fuego de su propiedad, aún mantenía su vínculo con la institución policial, lo que genera preocupación por la posible protección de sus derechos en un contexto de violencia extrema.

En las imágenes, se puede observar cómo dos compañeros uniformados se acercan a la puerta de la peluquería, pero no actúan de inmediato, y simplemente desaparecen de la vista sin intervenir.

Posteriormente, el agresor es trasladado a un centro asistencial, donde fallece minutos después por las heridas autoinfligidas.

Este caso se suma a la alarmante estadística de feminicidios en Colombia. Según datos del Observatorio de Mujeres y Equidad de Género, entre enero y febrero de 2025 se registraron 126 feminicidios en todo el país, la mayoría de los cuales fueron cometidos con armas de fuego.

La violencia de género sigue siendo un problema estructural que requiere medidas urgentes tanto a nivel social como institucional.

La comunidad y las autoridades han expresado su rechazo ante este nuevo femicidio. El alcalde de Bogotá, Carlos Galán, publicó en su cuenta de X (antes Twitter): "Lamento profundamente el femicidio de Yesika Paola Chávez Bocanegra en Ciudad Bolívar.

Nada, absolutamente nada, justifica ni atenúa la gravedad de un femicidio. Toda nuestra solidaridad con sus familiares y amigos en este doloroso momento".

Este caso evidencia la necesidad de fortalecer las políticas de prevención y protección para las víctimas de violencia de género, así como de revisar los protocolos de actuación policial en casos de violencia doméstica.

La historia de Yesika se une a un largo listado de mujeres que han sido asesinadas por sus parejas o exparejas, muchas veces con armas de fuego, en un país donde la lucha contra la violencia de género aún enfrenta múltiples desafíos históricos y culturales.

La esperanza es que estos hechos sirvan para generar conciencia y exigir acciones concretas que protejan la vida y los derechos de las mujeres en Colombia.