El Instituto Vasco de Consumo, Kontsumobide, ha iniciado un proceso de investigación en torno a dos empresas que operan bajo la marca DUCHA CONFORT, debido a reclamaciones por prácticas comerciales fraudulentas y cláusulas abusivas. La acción, que podría derivar en sanciones, busca proteger los derechos de los consumidores en la región.

En la comunidad autónoma del País Vasco, el Instituto Vasco de Consumo, conocido como Kontsumobide, ha decidido abrir un expediente de carácter informativo y sancionador en relación con las prácticas comerciales de dos empresas que operan en el sector de instalaciones y mobiliario para el hogar, bajo la marca comercial DUCHA CONFORT.

Las compañías involucradas, Sintagmal 2015 e Iber Home 2015, han sido objeto de múltiples reclamaciones por parte de consumidores, motivando así la investigación por parte del organismo regulador.

La decisión de Kontsumobide se ha motivado ante un aumento significativo en las reclamaciones recibidas, específicamente 21 reclamaciones contra Sintagmal 2015 y 37 contra Iber Home, tanto en oficinas territoriales como en asociaciones de consumidores en toda la región del País Vasco.

La mayor parte de estas quejas se relacionan con cláusulas consideradas abusivas en los contratos, además de alteraciones en los plazos de ejecución de obras y cargos por adelantado que no corresponden a los trabajos realizados.

Este comportamiento se enmarca en una tendencia global donde las empresas en sectores de servicios para el hogar enfrentan mayor vigilancia debido a prácticas comerciales poco transparentes.

El proceso, que tendrá carácter sancionador, contempla la posibilidad de que, si durante la investigación se detectan indicios de fraude o incumplimiento de la normativa vigente, el caso sea remitido a la fiscalía en el marco del convenio de colaboración que mantiene Kontsumobide con la Fiscalía Superior del País Vasco.

La ley en esta materia, en línea con normativas europeas, protege especialmente los derechos económicos y de seguridad de los consumidores, permitiendo a los órganos reguladores promover la transparencia y sancionar conductas engañosas.

Es importante recordar que la historia del control administrativo en el sector del consumo en Euskadi se remonta a décadas atrás, cuando la región empezó a establecer mecanismos de protección al consumidor frente a prácticas abusivas.

La implementación del estatuto de protección data de los años 80, impulsada por el crecimiento económico y el aumento de las transacciones comerciales, que invirtieron en sectores de servicios y productos para el hogar.

Kontsumobide, además de esta función sancionadora, cumple con la tarea de brindar información pública sobre reclamaciones y prácticas empresariales, en cumplimiento del artículo 52 del Estatuto de las Personas Consumidoras y Usuarias.

Dicho artículo establece que el instituto puede hacer públicas las reclamaciones y los motivos de las mismas, siempre garantizando la protección de los datos personales de los implicados, para fortalecer la transparencia y los derechos de los consumidores.

La vigilancia en este campo se refuerza en un contexto donde el mercado europeo, incluyendo a España, ha endurecido su normativa para prevenir fraudes y garantizar la protección en cada etapa de la relación de consumo.

La reciente acción de Kontsumobide se enmarca en estos esfuerzos por promover relaciones comerciales más justas y transparentes, que beneficien a los consumidores y fomenten la competencia leal en el mercado vasco.

Desde la institución se hace un llamado a las empresas a cumplir con la normativa y respetar los derechos de los usuarios, para evitar futuras sanciones y garantizar la confianza en el sector.