El arquero de River Plate continúa sumando logros destacados en su carrera, superando récords y consolidándose como una pieza clave en el éxito del club. A sus 37 años, Armani mantiene un rendimiento excepcional y busca igualar las marcas legendarias del fútbol argentino.
Franco Armani, el arquero de River Plate, no deja de hacer historia en su trayectoria deportiva. Tras la reciente igualdad sin goles contra Libertad de Paraguay, Armani alcanzó las 158 porterías a cero en partidos con el club, rompiendo así el récord que mantenía Ubaldo Matildo Fillol, una de las figuras más emblemáticas del arco argentino.
Este logro se suma a su ya impresionante lista de marcas, consolidándolo como uno de los mejores arqueros en la historia del fútbol sudamericano.
Para entender la magnitud de esta hazaña, es importante contextualizar los datos. Armani ha logrado mantener su portería invicta en 158 partidos a lo largo de 347 partidos disputados con River Plate. En comparación, Fillol, considerado uno de los mejores en su puesto, consiguió 158 porterías imbatidas en 406 encuentros, lo que significa que Armani presenta un promedio de 0.45 goles en contra por partido, frente al 0.38 del legendario arquero en sus épocas de gloria. Esta diferencia de eficiencia habla del gran nivel del arquero santafesino, que aún a sus 37 años, en octubre cumplirá 38, sigue demostrando ser un guardameta con hambre de gloria y en plena vigencia.
El papel de Armani en la defensa de River en competiciones internacionales ha sido fundamental. En la reciente Copa Libertadores, por ejemplo, volvió a ser protagonista con importantes intervenciones que evitaron goles y aseguraron resultados favorables.
Destacó particularmente en una jugada en la cual pudo detener un mano a mano con Hugo Fernández, quien había avanzado con velocidad hacia su arco. El arquero argentino salió airoso, sacando su brazo izquierdo en una magnífica estirada para desviar el disparo y mantener la valla invicta.
Previo a esa acción, Armani ya había mostrado su vigencia al saltar para despejar un centro que amenazaba filtrarse por encima de su arco. Estas actuaciones no solo refuerzan la importancia del arquero para River, sino que también consolidan su imagen como uno de los mejores en América del Sur.
En varias ocasiones, ha sido clave para que River evite resultados adversos, incluso en partidos donde la diferencia en el marcador pudo haber sido mayor.
Históricamente, Armani tiene todavía como meta igualar o superar las marcas de leyendas como Amadeo Carrizo, quien posee 187 porterías sin goles en la historia del club.
Aunque todavía le faltan algunas por encima de su cifra actual, su compromiso y nivel de rendimiento indican que está en camino de dejar una huella imborrable en la historia de River Plate.
En la escena internacional, Armani también ha demostrado su clase, sumando ya 109 apariciones en la Copa Libertadores, a solo cuatro partidos de alcanzar a Ever Hugo Almeida, uno de los íconos del fútbol sudamericano.
Con ello, continúa ampliando su legado y entrado en la historia del torneo continental, en el que River ha sido protagonista en los últimos años.
Este rendimiento excepcional también ha tenido un impacto directo en el rendimiento del equipo en el torneo local y en otras competencias. En el presente campeonato, River solo ha recibido un gol en lo que va de semestre, un signo claro de la solidez defensiva que aporta Armani bajo los palos.
La confianza que le otorgan sus compañeros y la afición se refleja en su estabilidad y en su capacidad para seguir rindiendo al máximo nivel.
En definitiva, Franco Armani es un arquero que ha sabido combinar talento, experiencia y liderazgo para convertirse en una figura clave en River Plate.
Sus récords y actuaciones refuerzan su estatus como uno de los mejores en la historia del fútbol argentino y sudamericano, y todavía tiene muchas metas por alcanzar en su carrera profesional.