La fase regular de la Liga Nacional de Baloncesto cerró con emoción y anunció el inicio de los playoffs, donde equipos como Boca, Oberá, Instituto y Quimsa lucharán por avanzar a las instancias definitivas. La competencia continúa en un momento clave para definir quién será el campeón de la temporada 2024/25.

La Liga Nacional de Básquetbol de Argentina culminó su tramo regular con una mezcla de suspenso, historias de recuperación y resultados inesperados, preparando el escenario para una apasionante etapa de playoffs.

La fase inicial, que se desarrolló en un clima de gran competitividad, concluyó con Boca Juniors como el equipo más sólido tras terminar en la primera posición, con un récord de 29 victorias y solo 9 derrotas, lo que les aseguró la ventaja de localía en todas las series que disputarán.

Por su parte, Obras Basket, que finalizó en el quinto puesto en la clasificación, se enfrentará en la serie de reclasificación a Atenas de Córdoba.

Obras, con un récord de 24 victorias y 14 derrotas, buscaba mantener la cuarta posición y asegurarse un cruce más favorable. Sin embargo, perdió su último encuentro frente a Instituto, que con una actuación destacada terminó en la tercera posición con un récord de 26 victorias y 12 derrotas.

Instituto, último campeón de la Liga y actual subcampeón, aseguró su lugar en los playoffs tras una buena temporada bajo la dirección de Lucas Victoriano.

Atenas, que hizo su regreso a la máxima categoría tras varias temporadas en divisiones inferiores, logró terminar en la 12ª posición con un balance de 19 victorias y 19 derrotas.

La historia del club cordobés es emblemática, pues en su mejor época en la Liga Nacional, a finales de los años 70 y principios de los 80, Atenas fue considerado uno de los equipos más importantes del baloncesto argentino, con múltiples títulos nacionales y una destacada participación en competiciones internacionales.

Otra serie destacada la protagonizarán Riachuelo de La Rioja y Unión de Santa Fe, ambos equipos con récords de 22 y 19 victorias respectivamente. Riachuelo, que sufrió la suspensión de un partido por las fuertes lluvias e inundaciones en su ciudad, jugará en casa contra Unión en un duelo que ya era esperado y confirmado antes de finalizar la fase regular.

Riachuelo, que en la temporada pasada consolidó su crecimiento en la Liga, aspira a seguir sorprendiendo tras una histórica clasificación que le permitió llegar a los playoffs.

En Corrientes, se enfrentan en un clásico local Regatas y San Martín en un cruce que promete mucha pasión. Históricamente, San Martín ha tenido un pequeño dominio en estos enfrentamientos, con una ventaja de 2-1 en playoff, pero el local tiene la ventaja de jugar en su cancha y buscará mantener esa estadística.

San Martín, con un récord de 19 victorias y 19 derrotas, ha demostrado ser uno de los equipos más consistentes en los últimos años, llegando a la fase final en varias ocasiones recientes.

Por otro lado, Oberá, que ocupó la segunda posición tras asegurar su permanencia en la Liga, se preparará para enfrentar en cuartos de final al ganador del cruce entre Ferro Carril Oeste y Gimnasia de Comodoro Rivadavia.

Oberá, con un récord de 26-12, tiene la esperanza de mejorar su performance del año pasado, cuando fue eliminado en la primera ronda tras un buen inicio.

La historia del club misionero está marcada por su rápida ascensión en la Liga, lograda en solo una década desde su ascenso en 2014, y ahora busca consolidarse entre los mejores del baloncesto argentino.

La serie entre Ferro y Gimnasia promete ser muy pareja. Ferro, que finalizó octavo en la clasificación con un récord de 20-18, sumó su quinto triunfo consecutivo en el cierre de la fase regular, y aspira a dar la sorpresa en una serie que puede extenderse.

Gimnasia, que quedó noveno, también con 20 victorias y 18 derrotas, buscará dar la vuelta en su propia cancha.

El equipo que avance en esa serie enfrentará a Quimsa de Santiago del Estero, uno de los equipos más destacados en la fase regular con marca de 25-13.

Tras una ajustada victoria en su último compromiso, los dirigidos por Sebastián González lograron terminar en la cuarta posición y ganarían ventaja de localía en la fase de cuartos.

Quimsa es reconocido por su estilo de juego técnico y por tener en su plantilla a algunos de los mejores jugadores del torneo.

La fase de reclasificación continuará con partidos programados para lunes y jueves, y, en caso de necesitarlos, se disputarán partidos de desempate el sábado 31 de mayo y el martes 3 de junio.

La tensión y el nivel competitivo aumentan a medida que los equipos luchan no solo por avanzar a la siguiente etapa, sino también por la merecida oportunidad de luchar por el título.

Mientras tanto, los equipos que finalizaron en la parte baja de la tabla, como Zárate Basket y Argentino de Junín, jugarán en busca de mantener su lugar en la Liga, enfrentándose en una serie de permanencia que definirá quién continuará en la máxima división.

Zárate Basket, con solo 10 victorias en toda la temporada, y Argentino, que apenas sumó 3 triunfos, intentarán evitar el descenso que los enviaría a la Liga Argentina, competición en la que lucharán por volver a ascender en las próximas temporadas.

La emoción y la historia todavía tienen mucho qué ofrecer en esta apasionante edición de la Liga Nacional de Baloncesto.