La ciudad aragonesa se posiciona como referente en la gestión financiera, destacando la reducción de su deuda y la mejora de la carga fiscal sobre los ciudadanos.

Zaragoza se ha consolidado como la segunda gran ciudad de España con mayor reducción de deuda en el último año y en los últimos cuatro ejercicios.

Según el informe definitivo del Banco de España, la capital aragonesa cerró el año 2024 con una deuda total de 568 millones de euros, cifra que representa una disminución de 3 millones en comparación con lo que había anunciado la alcaldesa, Natalia Chueca, hace unas semanas.

Este monto de 568 millones incluye la imputación contable del plan de amortización del tranvía, que asciende a 122 millones de euros y que, según las normativas del Banco de España, debe ser contabilizado desde hace algunos años.

Si se excluye este concepto, la deuda real de Zaragoza sería de 446 millones de euros.

Durante el último año, el Ayuntamiento de Zaragoza ha logrado una notable reducción de su carga financiera, disminuyendo en 35 millones de euros, lo que equivale a un 5,8% del total.

Al cierre de diciembre de 2023, la deuda era de 603 millones. Si se observa la evolución desde el año 2020, la reducción total alcanza los 133 millones de euros, lo que representa un 19%. Este dato posiciona a Zaragoza como la segunda gran ciudad con mayor descenso porcentual de deuda en los últimos cuatro años.

Blanca Solans, consejera de Hacienda y Fondos Europeos del Ayuntamiento, ha valorado positivamente estos resultados, que reflejan el esfuerzo por sanear las cuentas municipales.

Según Solans, la disminución de deuda en estos cuatro años es comparable a la inversión necesaria para la construcción de La Nueva Romareda.

En comparación con otras ciudades, el Banco de España destaca a Valencia como la ciudad que más ha reducido su deuda, con un 23% en el último año.

Le siguen Zaragoza (-5,8%), Córdoba (-5,4%), Valladolid (-4,4%), Murcia (-3,7%) y Madrid (-0,86%). Por otro lado, varias ciudades han visto un aumento en su carga financiera en 2024, como Alicante (+47%), Bilbao (+20%), Palma de Mallorca (+12,8%), Málaga (+12,2%), Sevilla (+11,2%) y Barcelona (+5,6%).

Desde 2020, Zaragoza y Málaga comparten un descenso del 19%, situándose en la segunda posición después de Valencia, que ha logrado una reducción del 51%.

En estos cuatro años, solo Palma de Mallorca, Murcia y Madrid han conseguido disminuir su deuda. En contraste, ciudades como Barcelona han incrementado su carga financiera en un 73,5%.

La consejera Blanca Solans ha enfatizado que una buena gestión permite bajar los impuestos a los ciudadanos mientras se avanza en la reducción de la deuda y se ejecutan grandes proyectos de inversión para transformar la ciudad.

Por ejemplo, el Ayuntamiento ha mantenido el tipo mínimo legal en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) desde hace varios años, lo que ha aliviado la presión fiscal, bajando un 38% en comparación con 2015, cuando la deuda superaba los mil millones de euros.

En resumen, Zaragoza ha alcanzado ratios históricos en tres aspectos clave para su salud financiera: el mayor Presupuesto Municipal de su historia, la menor carga fiscal para los ciudadanos y el menor porcentaje de deuda desde 1986.

Estos logros subrayan el compromiso del Ayuntamiento de Zaragoza por una gestión eficiente y responsable.