El ayuntamiento de Sevilla aumenta las plazas de acogida y refuerza la atención a las personas sin techo ante la oleada de calor, incluyendo nuevas inversiones y recursos específicos.
En Sevilla, las autoridades municipales han puesto en marcha un conjunto de acciones para hacer frente a la llegada de la temporada estival y las altas temperaturas que afectan especialmente a las personas en situación de sinhogarismo.
Con el objetivo de evitar riesgos para la salud y garantizar recursos básicos a los más vulnerables, el Ayuntamiento ha incrementado en 18 el número de plazas específicas para la atención y acogida durante los meses de verano, incluyendo medidas excepcionales ante la previsión de olas de calor.
Este dispositivo especial, que comenzó oficialmente el 23 de junio y se extenderá hasta mediados de septiembre, contempla una red de acojida que habitualmente ofrece 94 plazas permanentes, con la posibilidad de ampliar esta capacidad a un máximo de 114 en días con alerta amarilla o naranja emitida por la Agencia Estatal de Meteorología.
Para este año, en línea con las circunstancias meteorológicas, se adelantaron en un mes estas instalaciones adicionales, que tienen como prioridad ofrecer un espacio seguro y climatizado, además de recursos como duchas, comida y áreas de descanso.
El compromiso del Consistorio no se limita a ampliar las plazas de acogida. Se ha reforzado el funcionamiento de los centros gestionados por diferentes entidades, como el Centro de Acogida Municipal (CAM), que ahora abre a las 8:00 de la mañana y cierra a las 20:00 horas, permitiendo a las personas vulnerables disponer de más tiempo para acceder a sus servicios básicos durante las horas más calurosas.
Asimismo, también se incrementaron los servicios de la Unidad Municipal de Emergencias Sociales y de Exclusion Social (UMIES), que intensificó sus rutas de atención en toda la ciudad, especialmente en las zonas con mayor incidencia de personas sin hogar.
Estos equipos no solo entregan agua y recursos informativos, sino que también evalúan cada caso para realizar posibles derivaciones a los centros adecuados, con el fin de ofrecer una atención más rápida y efectiva.
El presupuesto destinado a estos recursos y servicios sociales también ha tenido un aumento importante, contando con cerca de 16 millones de euros en el marco del nuevo contrato de UMIES, que permite contratar a más personal y ampliar las unidades en calle, logrando una mejor cobertura en toda la ciudad.
Este esfuerzo forma parte de la estrategia municipal para reducir la vulnerabilidad social y proteger especialmente a quienes, por diferentes circunstancias, viven en situación de calle.
La colaboración con organizaciones como Fundación Atenea y otros centros solidarios también refuerza la red de atención rápida y especializada. Además, el Ayuntamiento ofrece un número de teléfono gratuito, el 900 922 250, donde profesionales gestionan el acceso a recursos sociales y plazas de emergencia.
En caso de urgencias, se recuerda el uso del 112, para garantizar una respuesta inmediata ante cualquier situación.
Desde una perspectiva histórica, Sevilla ha sido una ciudad que tradicionalmente ha tenido que hacer frente a desafíos sociales relacionados con la falta de vivienda y la exclusión social, problemáticas que la ciudad ha tratado de abordar desde hace décadas con diferentes políticas y programas sociales.
La actual iniciativa refleja una voluntad de anticiparse y adaptarse a las condiciones climáticas extremas, que, en los últimos años, han ido en aumento por el cambio climático, acentuando la necesidad de acciones específicas para proteger a los colectivos más vulnerables en épocas de altas temperaturas.