El Ayuntamiento de Sevilla ha puesto en marcha dos tótems de desfibriladores en lugares clave de la ciudad, reforzando las acciones preventivas en salud pública y cardioprotección en espacios públicos concurridos.

En Sevilla, la delegada de Deporte y Promoción de la Salud, Silvia Pozo, junto a Evelia Rincón, responsable de Arbolado, Parques y Jardines, han asistido esta mañana a la inauguración de un innovador tótem de desfibrilador situado en el Parque de María Luisa, cerca de la histórica Plaza de España.

Este nuevo dispositivo se suma a la instalación previa en la Plaza Nueva, junto al Ayuntamiento, con el objetivo de que Sevilla cuente por primera vez con puntos accesibles en la vía pública para actuar rápidamente ante una emergencia cardíaca.

Este ambicioso proyecto ha sido posible mediante la colaboración de la Fundación Andaluza de Cardiología (FAC) y la Fundación Española del Corazón (FEC), con la implicación activa del Ayuntamiento sevillano.

La iniciativa, desarrollada por la empresa Almas Industries, busca fortalecer la protección de la salud ciudadana en espacios públicos de alta afluencia, mediante la instalación de tótems solares que contienen kits completos de reanimación y que están geolocalizados para facilitar su localización en casos de urgencia.

Gracias a estos nuevos puntos en la Plaza de España y en la Plaza Nueva, Sevilla fortalece su compromiso con la cardioprotección de sus ciudadanos y visitantes.

Estos espacios emblemáticos reciben cada año a miles de personas, quienes ahora cuentan con recursos inmediatos en caso de paradas cardíacas. La tecnología de estos tótems, alimentados por energía solar, garantiza su funcionamiento constante y autónomo. Además, su diseño innovador incluye instrucciones claras y la capacidad de ser utilizados por personas sin formación previa en reanimación.

Desde hace años, el Ayuntamiento sevillano ha desarrollado un plan integral para incrementar la seguridad en salud pública. Esto incluye la dotación de desfibriladores en instalaciones municipales y en eventos masivos como la Semana Santa, la Feria de Abril o La Magna. En total, más de 12.000 personas han sido capacitadas en técnicas de reanimación y uso de estos dispositivos, en un esfuerzo continuado por promover una cultura de prevención.

Además, en los últimos años, Sevilla ha avanzado en la incorporación de desfibriladores automáticos en sus espacios culturales, incluyendo teatros, museos, centros culturales y bibliotecas, gestionados por el Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS).

Esta medida ha posicionado a la ciudad como pionera en la protección cardiovascular en contextos culturales, cumpliendo con la normativa autonómica y reforzando la seguridad de quienes acuden a estos recintos.

Los datos históricos demuestran que la rápida actuación con un desfibrilador puede aumentar significativamente las probabilidades de supervivencia en casos de infarto.

Según la Organización Mundial de la Salud, la implementación de equipos públicos de reanimación ha reducido la mortalidad por parada cardiorrespiratoria en muchas ciudades europeas.

La inversión en tecnología y formación ciudadana en Sevilla refleja un compromiso serio con la salud pública, priorizando la prevención y el bienestar colectivo en sus espacios urbanos.