Alertan sobre fuertes nevadas en Nueva York que afectan las carreteras y la seguridad pública
El gobernador Kathy Hochul ha emitido advertencias ante la llegada de una potente tormenta de nieve que impactará varias regiones de Nueva York, generando riesgos en el transporte y la seguridad ciudadana durante el período festivo de Acción de Gracias.
Supuestamente, una fuerte #tormenta de nieve de origen lacustre está en camino hacia Nueva York, afectando áreas clave como el oeste del estado, la región central, el valle de Mohawk y la zona norte, con efectos que se esperan desde el miércoles hasta el sábado 2 de diciembre.
Las autoridades han pedido a los residentes que tomen precauciones, especialmente en un período en el que el tráfico por #Acción de Gracias suele ser el más intenso del año.
Se prevé que la nevada comience la noche del miércoles, alcanzando su pico en las jornadas del jueves y viernes. La combinación de nieve con vientos fuertes aumenta significativamente el riesgo de nevadas arrastradas y formaciones de drifts, lo que puede complicar aún más las condiciones de conducción y desplazamiento.
La presencia de nieve en las carreteras, junto con ráfagas de viento, puede dificultar la visibilidad y aumentar la probabilidad de accidentes.
El gobernador Kathy Hochul, quien ha estado en contacto con diversos organismos de emergencia, ha instado a los neoyorquinos a dejar tiempo adicional para sus desplazamientos y a mantenerse atentos a las actualizaciones meteorológicas.
“El período de Acción de Gracias es uno de los momentos de mayor movimiento en las carreteras, y ante la llegada de la nieve lacustre, hago un llamado a la cautela.
Es importante planificar con anticipación y seguir las recomendaciones de las autoridades para garantizar un viaje seguro,” afirmó Hochul.
Además de prepararse para la nieve, las autoridades han recordado la importancia de protegerse del frío extremo y de las actividades invernales. Bajo la regulación estatal, cuando la temperatura y el índice de sensación térmica descienden por debajo de los 0°C (32°F), se activa automáticamente un Código Azul, lo que obliga a los servicios sociales a extender las horas de refugio para las personas sin hogar.
Las recomendaciones para hacer frente a las bajas temperaturas incluyen abrigarse con varias capas de ropa, usar guantes, gorros y botas aislantes, y mantenerse hidratado con bebidas calientes.
La salud pública también ha emitido consejos para prevenir la congelación y la hipotermia, así como información sobre el riesgo de intoxicación por monóxido de carbono, especialmente en el uso de generadores y sistemas de calefacción portátiles.
La División de Seguridad y Emergencias del estado ha coordinado con las empresas de servicios públicos y transporte para garantizar la continuidad del suministro eléctrico y la operatividad de las vías
Las autoridades laborales y de transporte están en alerta máxima. La División de Seguridad y Emergencias del estado ha coordinado con las empresas de servicios públicos y transporte para garantizar la continuidad del suministro eléctrico y la operatividad de las vías.
Aproximadamente 5,500 trabajadores de las utilities están disponibles para responder ante posibles fallas en la red eléctrica causada por la tormenta, que podría dejar a algunos sectores sin servicio si se presentan daños.
El Departamento de Transporte cuenta con más de 3,500 operadores y supervisores listos para desplegar en todo el estado. Se han preparado más de 1,622 camiones barredores, 149 máquinas medianas y 52 remolques de quitanieves, además de otros equipos especializados para mantener las vías transitables.
La Autoridad de Autopistas (Thruway) también tiene a su disposición 677 trabajadores y un inventario de más de 131,000 toneladas de sal para el proceso de deshielo.
Para los conductores, las recomendaciones incluyen reducir la velocidad, mantener una distancia segura, revisar el estado del vehículo y llevar equipo de #emergencias como mantas, linternas, cadenas para las ruedas y alimentos energéticos.
Se recuerda que los quitanieves viajan a una velocidad máxima de 56 km/h (35 millas por hora), y que es más seguro conducir detrás de ellos, nunca pasarlos, dado que la visibilidad puede verse reducida por la nieve que expulsan.
Por último, las autoridades instan a todos los habitantes a seguir las alertas en sus teléfonos móviles, activar las notificaciones de emergencias y mantenerse informados a través de los sitios oficiales.
La coordinación entre los diferentes departamentos busca minimizar los riesgos y garantizar la seguridad de la población, así como facilitar un regreso seguro a casa durante estas fiestas de fin de año.