La Generación Z transforma la Navidad en casa y revela por qué la nostalgia manda en TikTok
Análisis sobre por qué la Generación Z apuesta por decoraciones hechas a mano para Navidad, impulsadas por la nostalgia y difundidas a través de TikTok.
En un salón iluminado por una luz cálida, se ve una guirnalda de pino y lazos que cuelgan sobre la chimenea, junto a un árbol decorado en tonos terrosos.
A los 28 años, Jenna Brooks está recreando decoraciones que hizo en su niñez. Este año, ella y otros miembros de la Generación Z—nacidos entre 1997 y 2012—buscan traer ese espíritu a la vida adulta y lo documentan en TikTok.
En toda la plataforma, videos que muestran cómo hacer adornos de fieltro, cadenas de papel y guirnaldas de naranja deshidratada bajo hashtags como #homemadechristmas y #diychristmas acumulan millones de visualizaciones.
Para Brooks, hacer a mano las decoraciones es una forma de conservar el significado de la temporada. Recuerda cortar ramas para vestir la repisa de la chimenea, hornear galletas de mantequilla con su madre y crear adornos a partir de objetos domésticos como masa de sal, palitos de helado y pasta.
La #Generación Z ha crecido con el mundo online y, al estar expuesta a ese universo durante toda su juventud, muchos sienten que buscan un retorno a una experiencia más tangible.
El estilo de estos adornos, con guirnaldas de naranja seca, estrellas de papel y ornamentos bordados, rememora recuerdos de la infancia. La tendencia es, en parte, una vuelta a años de contenidos navideños curados en internet. La Generación Z fue la primera en vivir la temporada navideña en la era digital, influida por hauls de YouTube, videos Vlogmas y tableros de Pinterest con estética como navidad costera o navidad kitsch.
Todo ello puede generar una presión externa para que las fiestas sean perfectas, señalan algunos especialistas. La psicóloga Clay Routledge, que estudia la nostalgia, dice que esa sensibilidad hacia lo antiguo se relaciona con la insatisfacción con la situación actual y empuja a buscar consuelo en recuerdos y tradiciones tangibles.
Además, afirma que hay algo en la experiencia humana que requiere lo analógico, en persona y multisensorial, que no puede replicarse plenamente en el mundo digital.
Más allá de la nostalgia
Más allá de la nostalgia, hacer las decoraciones en casa también aparece como una estrategia pragmática para una generación con préstamos estudiantiles, un mercado laboral más flojo y un costo de vida alto.
Un sondeo de Thrivent señala que aproximadamente el 70% de los encuestados dicen que la inflación afecta sus finanzas navideñas, y un 58% están más preocupados que en años anteriores por cómo administrar el dinero.
Con esa presión, muchos creadores aprovechan recursos que ya tienen en casa, reciclando bolsas de la compra o cajas de cartón para convertir en estrellas, casas de papel o adornos simples.
En algunos videos se ve el lema: decoración navideña con bajo consumo. Supuestamente, estas prácticas podrían ayudar a incluir a más personas en la celebración sin depender de un gasto excesivo.
La nostalgia, dicen los expertos, puede ser también una herramienta para el futuro. Recordar lo que ya fue puede reforzar el sentido de pertenencia y, a la vez, inspirar tradiciones nuevas que convivan con el progreso. La #nostalgia puede ser una palanca de progreso si nos ayuda a recuperar aquello que hemos dejado atrás y vale la pena reintroducir, subraya Routledge.
Este fenómeno continúa creciendo cada temporada y su influencia parece coexistir con la digitalización, no como un rechazo a la tecnología, sino como una búsqueda de experiencias compartidas en casa.
Finalmente, el reportaje se apoya en la cobertura de USA TODAY de la escritora Rachel Hale y su equipo, que analizan la relación entre Generación Z, creatividad #DIY y la nostalgia de la Navidad.
Supuestamente, el movimiento podría evolucionar y dejar una huella duradera en la forma de celebrar la Navidad.