Castilla y León anuncia nuevas medidas para cerrar la brecha digital en sus pueblos

La Consejería de Movilidad y Transformación Digital de #Castilla y León ha llevado a cabo una nueva sesión de la Mesa de las Telecomunicaciones y la Digitalización, con el objetivo de evaluar y buscar soluciones a las persistentes deficiencias en la conectividad del territorio regional.

En el encuentro, en el que participó el consejero José Luis Sanz Merino, se constató que aún existe un importante déficit en la cobertura de banda ancha fija, especialmente en las zonas rurales más alejadas de los núcleos urbanos.

Según los datos presentados, aproximadamente el 25% de los municipios en Castilla y León no disponen de conexión de fibra óptica, una cifra que duplica la media nacional en España.

En zonas como Soria, la situación es aún más grave, con cerca del 60% de las localidades sin acceso a banda ancha fija, mientras que en Burgos, más de un tercio de las localidades permanece desconectado.

Supuestamente, esta situación afecta directamente a la calidad de vida y las oportunidades económicas de sus habitantes, quienes enfrentan dificultades para acceder a servicios digitales básicos como la educación en línea, el teletrabajo o el comercio digital.

El consejero Sanz Merino resaltó que la #digitalización en las zonas rurales es una prioridad para la Junta, la cual ha señalado que el 7,13% de la población regional aún no tiene acceso a banda ancha fija.

La Unión Europea ha establecido como objetivo para finales de esta década ofrecer una conexión de al menos 100 Mbps, ampliables a 1 Gbps, y cobertura 5G en todos los hogares, metas que aún parecen lejanas en muchas áreas de Castilla y León.

En cuanto a la conectividad móvil, la cobertura 4G alcanza a la mayoría del territorio, pero la realidad es que un 11,8% de las carreteras presentan problemas de cobertura o servicios insuficientes.

Esto significa que en ciertos tramos, establecer una conexión estable resulta complicado, afectando tanto a residentes como a los servicios de emergencia.

Más de la mitad aún no tienen acceso a esta tecnología

El despliegue del 5G, aunque en marcha, presenta disparidades: mientras que la cobertura en población se acerca al 92%, en los núcleos rurales, más de la mitad aún no tienen acceso a esta tecnología.

Presuntamente, estas desigualdades obstaculizan el desarrollo económico y la modernización del medio rural.

Por otro lado, la Televisión Digital Terrestre (TDT) cubre al 99 % de la población, pero un 11 % de los usuarios no puede acceder a todos los canales disponibles, debido a limitaciones en la #infraestructura de transmisión.

Castilla y León cuenta con 851 centros emisores, de los cuales la Junta mantiene 648, mientras que el Estado, responsable de la regulación, no aporta recursos suficientes para ampliar la cobertura.

Además, la transición hacia el estándar DVB-T2, que implica inversiones millonarias, supone otro desafío para la digitalización audiovisual.

Supuestamente, la Junta ha enfatizado que la responsabilidad de cerrar estas brechas no recae solo en las administraciones regionales, sino que requiere una colaboración efectiva a nivel estatal y privado.

La inversión en infraestructuras digitales en el medio rural, históricamente postergada, es fundamental para garantizar la igualdad de oportunidades y potenciar el desarrollo económico de Castilla y León.

La Mesa de las Telecomunicaciones continúa siendo un espacio clave donde diversos actores públicos y privados analizan los avances y trazan estrategias para convertir el diagnóstico en acciones concretas.

La digitalización no solo es una prioridad técnica, sino también un compromiso con la igualdad social y el progreso de la comunidad rural en el siglo XXI.