La ciudad de Valencia celebra un luto oficial por las víctimas de la DANA, con actos simbólicos y apoyo a los afectados.

La situación ha impactado severamente no solo a la capital, sino también a las comarcas del sur, dejando a la comunidad en estado de conmoción.
Como muestra de respeto y pena, el Ayuntamiento de #Valencia organizó un minuto de silencio en la Casa Consistorial, al cual asistieron tanto concejales de los diferentes grupos políticos como numerosos funcionarios y ciudadanos.
Durante este acto, se alzó un clamor unánime por la necesidad de solidarizarse con quienes han perdido a sus seres queridos, entre los cuales se encuentra Rubén Lima, un oficial de la Policía Local, cuya trágica muerte ha dejado una honda huella en la comunidad.
Las banderas del Ayuntamiento y otras instituciones municipales ondean a media asta en un símbolo palpable del duelo que embarga a la ciudad. Esta medida, según el Boletín Oficial del Estado y el Diario Oficial de la Generalitat, se mantendrá hasta el próximo 2 de noviembre, evidenciando la seriedad de la situación.
Durante este periodo, los monumentos y edificios públicos permanecerán a oscuras, un gesto que añade un tono sombrío a la ya afectada atmósfera local.
Además, el Ayuntamiento ha decidido suspender todas las actividades culturales y eventos programados hasta nuevo aviso, priorizando la atención y el apoyo a las zonas más afectadas.
La alcaldesa, María José Catalá, en un emotivo mensaje, extendió sus condolencias y un cálido abrazo a los familiares de las víctimas, reafirmando su compromiso con los servicios de emergencia y el despliegue de recursos en las áreas que más lo necesitan.
La portavoz del grupo municipal Compromís, Papi Robles, enfatizó la necesidad inmediata de ayudar a los vecindarios más vulnerables, como Torre y Castellar-l'Oliveral, instando a que todos los servicios públicos se involucren en esta tarea.
Por su parte, el representante municipal del PSOE, Borja Sanjuán, solicitó que los puntos de ayuda sean reubicados más cerca de los afectados, sugiriendo que la asistencia no debe limitarse a lugares lejanos como la Petxina o l’Alqueria.
Juanma Badenas, concejal de Parques y Jardines, también se unió a la petición de atención rápida y efectiva para que las personas afectadas puedan regresar a la normalidad en el menor tiempo posible.
Este evento se suma a una serie de desastres que la región ha enfrentado en el último año, recordando la crisis en Campanar, donde la respuesta comunitaria logró mitigar los daños.
Valencia
Valencia, a lo largo de su historia, ha demostrado en muchas ocasiones su capacidad de resiliencia ante catástrofes naturales. Este nuevo reto no solo pone a prueba la fortaleza de su ciudadanía, sino que también resalta la necesidad de trabajar juntos, como una sola comunidad, para superar las adversidades y honrar la memoria de aquellos que han perdido la vida.