El Ayuntamiento de València comienza una serie de trabajos para limpiar barrancos y el nuevo cauce del río Túria, garantizando una mejor gestión del agua ante posibles lluvias intensas. La iniciativa busca proteger las zonas de Carpesa y Massarrojos mediante intervención directa en los cauces y caminos de servicio, con una inversión que supera los 1.600 euros (aproximadamente 1.500 euros en moneda local).

Imagen relacionada de valencia intensifica la limpieza de sus cauces para enfrentar futuras lluvias extremas

La decisión, aprobada por la Junta de Gobierno Local, consiste en realizar trabajos de limpieza en los barrancos del Carraixet y Palmaret, así como en el nuevo cauce del río Túria, con fondos propios y sin depender en exclusiva de organismos supranacionales.

Supuestamente, en los últimos meses, los residuos acumulados en estos cauces han dificultado el paso del agua y aumentado el peligro de desbordamientos durante las lluvias más fuertes.

La iniciativa busca eliminar restos de vegetación, áridos, fangos y otros materiales que obstruyen la corriente, además de crear caminos de servicio que faciliten futuras labores de mantenimiento y limpieza.

El pasado 19 de septiembre de 2024, el Consejo de Distrito de Pobles del Nord solicitó formalmente a la Confederación Hidrográfica del Xúquer (CHX) que autorice la ejecución de estos trabajos.

La CHX, que supervisa la gestión de los ríos y barrancos en la región, supuestamente había respondido a principios de julio de 2025, indicando que el estudio sobre el valor ecológico de estos espacios está en proceso y que las actuaciones de limpieza podrían realizarse por el Ayuntamiento tras obtener la autorización administrativa correspondiente.

Para ello, el Ayuntamiento ha encargado a la empresa pública Tragsa la realización de estas tareas, aunque supuestamente también tiene la opción de llevar a cabo los trabajos con recursos propios, siempre que disponga de la declaración responsable o autorización administrativa previa.

La prioridad es actuar rápidamente, especialmente ante la posibilidad de lluvias intensas en otoño, que podrían volver a desbordar los cauces si no se actúa a tiempo.

Durante el mes de agosto, los servicios municipales, a través de la empresa Agricultores de la Vega de València (SAV), lograron retirar más de 150 toneladas de residuos, vegetación y sedimentos acumulados en los pilares de los seis puentes que cruzan el tramo entre la CV-400 y la V-31, en la Pista de Silla.

Estas labores de limpieza son esenciales para garantizar la correcta evacuación del agua y reducir el riesgo de inundaciones en estas zonas urbanas.

Supuestamente, en la noche del 29 de octubre de 2024, el nuevo cauce del río Túria alcanzó un caudal de 3.500 metros cúbicos por segundo, lo que provocó un arrastre masivo de restos como árboles, vegetación, áridos y fangos que dificultaron aún más el flujo del agua.

Puso en evidencia la importancia de mantener limpios los cauces y de contar con infraestructuras adecuadas para gestionar grandes volúmenes de agua

Este evento, conocido como la Dana de octubre pasado, puso en evidencia la importancia de mantener limpios los cauces y de contar con infraestructuras adecuadas para gestionar grandes volúmenes de agua.

Además, el Ayuntamiento pretende ampliar estas acciones, solicitando autorización a la CHX para limpiar también los sedimentos y vegetación del barranco del Palmaret y otros tramos críticos, en un esfuerzo por fortalecer la protección de las pedanías de Carpesa y Massarrojos.

La inversión prevista en estos trabajos, que incluyen la creación de caminos de servicio, supera los 1.500 euros (unos 1.600 euros en moneda local), considerados necesarios para reducir riesgos y mejorar la #sostenibilidad de la #gestión hídrica en la ciudad.

Presuntamente, estas acciones forman parte de una estrategia integral que combina trabajos inmediatos de limpieza con estudios ecológicos y de impacto ambiental, con el objetivo de preservar la biodiversidad y garantizar la seguridad de los ciudadanos ante eventos meteorológicos extremos.