Las autoridades de València anuncian la vuelta a las aulas para este martes, excluyendo las zonas inundables y áreas afectadas por la dana en la ciudad y su fachada marítima, tras la modificación de la alerta meteorológica a naranja.

La alcaldesa María José Catalá explicó en rueda de prensa que, pese a esta decisión, las clases permanecen suspendidas en las zonas susceptibles de inundaciones y en aquellas afectadas por la dana, así como en la fachada marítima de la ciudad, que comprende zonas como Natzaret, Malva-rosa, Cabanyal-Canyamelar, Pinedo y El Saler.
Supuestamente, la medida se ha tomado en base a la evolución del temporal que ha azotado la región durante los últimos días. La AEMET había emitido inicialmente una alerta amarilla para este martes, pero en las últimas horas se ha elevado a naranja debido a la intensidad prevista de las #lluvias y las posibles inundaciones en zonas costeras y pedanías.
Sin embargo, presuntamente, las condiciones han mejorado ligeramente, permitiendo que la actividad escolar se reanude en la mayoría de los centros.
El Comité de Coordinación y #Protección Civil Local, conocido como CECOPAL, se reunió en la sala CISE, ubicada en la Central de Policía Local, para evaluar la situación.
La alcaldesa informó que el CECOPAL, que se constituyó formalmente el día anterior a las 13:00 horas, continúa en alerta y tomando decisiones en función de la evolución del temporal.
Durante la reunión, también se decidió mantener la suspensión de actividades deportivas y culturales en la ciudad, además de reforzar las recomendaciones de evitar desplazamientos innecesarios durante las horas más críticas, que se esperan para la tarde y noche.
La preocupación persiste por la posible llegada de lluvias intensas y vientos fuertes que podrían complicar aún más la situación
Supuestamente, las autoridades también han señalado que, aunque en la noche anterior no hubo incidencias graves, la preocupación persiste por la posible llegada de lluvias intensas y vientos fuertes que podrían complicar aún más la situación.
La alcaldesa resaltó que los bomberos y los servicios de emergencia no han reportado incidentes mayores, lo que indica una gestión eficaz de la emergencia hasta el momento.
En un contexto histórico, València y otras ciudades mediterráneas han enfrentado eventos meteorológicos extremos en el pasado, como las fuertes lluvias de 2012 que provocaron graves inundaciones y daños en infraestructuras.
La experiencia ha llevado a las autoridades a establecer protocolos de actuación más estrictos y sistemas de alerta temprana que, supuestamente, han ayudado a reducir el impacto en esta ocasión.
Por último, se recomienda a la ciudadanía que permanezca informada a través de los canales oficiales y que limite sus desplazamientos durante las horas de mayor riesgo.