Una kayakista ha protagonizado un valiente rescate en el Río Oromocto al salvar a una garza azul que estaba atrapada por anzuelos de pesca en su lengua.

Nancy Brown, una entusiasta de los paseos en kayak, se percató de la situación mientras navegaba por el río.

La garza azul es un ave común en la zona, pero esta vez algo la perturbó. Al acercarse, Brown se dio cuenta de que había varios anzuelos y una anguila enganchados en la lengua del ave.

Preocupada por la situación, Brown intentó buscar ayuda, pero no logró obtener ninguna respuesta.

Desafortunadamente, el ave voló asustada al ver el kayak y Brown se vio obligada a alejarse.

Sin embargo, no pudo dejar de pensar en la garza y decidió volver al día siguiente.

Fue entonces cuando Brown, junto con sus amigos Chris Barrett y Mark Robinson, se acercaron a la garza para ayudarla.

Robinson, con experiencia en el cuidado de animales heridos, logró ingresar al agua y utilizar cortadores de alambre para liberar a la garza de los anzuelos.

Fue un momento tenso, pero finalmente lograron quitar los anzuelos y la garza pudo volar nuevamente.

El incidente resalta la necesidad de tomar medidas preventivas para evitar que las aves queden atrapadas en anzuelos y líneas de pesca.

Según Pam Novak, directora de cuidado de vida silvestre del Instituto de Vida Silvestre del Atlántico, estos casos no son infrecuentes.

Las aves, atraídas por brillos en el agua, pueden enredarse en los anzuelos y sufrir lesiones graves.

Además, existe el riesgo de envenenamiento por plomo debido al consumo de objetos de pesca contaminados.

Novak insta a los pescadores a recoger y desechar correctamente su equipo de pesca, así como a ser conscientes de su entorno y evitar dejar objetos que puedan representar un peligro para la vida silvestre.

El valiente rescate de la garza azul por parte de Nancy Brown y sus amigos es un recordatorio de la importancia de cuidar y proteger a las especies animales que comparten nuestro entorno natural.