Un hombre de la Primera Nación Fort Severn fue herido en un ataque de oso polar mientras intentaba salvar a su esposa. Los expertos advierten sobre la creciente interacción entre humanos y osos en la región.

Un hombre de la Primera Nación Fort Severn en Ontario se encuentra en proceso de recuperación tras sufrir heridas graves en brazos y piernas durante un ataque de un oso polar este martes por la mañana.

Según el Servicio de Policía Nishnawbe Aski (NAPS), el hombre se lanzó sobre el oso para proteger a su esposa, que había sido blanco de la fiera.

El incidente tuvo lugar antes de las 5 a.m., cuando la pareja salió de su casa en busca de sus perros y se encontró con el oso polar en su camino.

La reacción del hombre fue inmediata: al ver que el animal se abalanzaba sobre su esposa, él se arrojó para evitar que la atacara.

En este acto heroico, el esposo recibió lesiones serias, aunque no ponen en peligro su vida.

Un vecino, al escuchar el alboroto, acudió en su ayuda y disparó al oso, el cual se retiró luego de recibir varios disparos.

Cuando la Policía llegó, encontraron al oso muerto en un área boscosa cercana, como resultado de las heridas sufridas.

La comunidad fue patrullada para asegurarse de que no hubiera otros osos polares merodeando en la zona, algo que es más común en el territorio, donde la presencia de estos animales es habitual.

La Primera Nación Fort Severn es la comunidad más septentrional de Ontario y alberga a aproximadamente 500 personas, quienes conviven a menudo con la fauna salvaje de la región, incluida la población de osos polares, que generalmente se siente atraída por la presencia de residuos o alimentos.

Alysa McCall, directora de divulgación de conservación en Polar Bears International, subraya que los ataques de osos polares suelen ser raros.

Estos animales, que a menudo atacan debido a la falta de alimento o por problemas de salud, generalmente no buscan confrontación con los humanos.

McCall aclara que en caso de ser atacado, es un mito que deberíamos jugar a estar muertos, recomendando en cambio defenderse con todas las fuerzas.

Con el cambio climático alterando los patrones de deshielo, los osos polares podrían estar buscando alimento más adentro de los territorios humanos.

Esto se debe a la disminución del hielo marino que limita su capacidad para cazar focas, su alimento preferido.

Este año, el deshielo en la Bahía de Hudson se produjo antes de lo habitual, lo que podría explicar la mayor cercanía de los osos polares a las comunidades.

El hecho de que los osos polares entren en contacto con seres humanos puede llevar a situaciones peligrosas, por lo que McCall aconseja asegurar los desperdicios y evitar viajar solos en áreas donde la presencia de osos es conocida.

En general, la interacción entre humanos y vida silvestre es un aspecto esencial a considerar en la conservación y seguridad de ambas partes.

Este incidente no solo revela el valor que algunas personas tienen por proteger a sus seres queridos, sino también la creciente problemática de la coexistencia entre humanos y animales salvajes en un mundo que cambia rápidamente debido a factores climáticos.