Los intensos incendios forestales en el Parque Nacional Jasper han llevado a la evacuación de miles de personas, generando preocupación sobre el bienestar de la fauna local como los caribúes y alces.

Esta semana, el Parque Nacional Jasper y su localidad han sido azotados por incendios forestales devastadores que han obligado a la evacuación de miles de personas.

Mientras que las personas se han preocupado por su seguridad, surge la inquietud sobre qué pasará con los animales salvajes que habitan en este hermoso parque, famoso por sus impresionantes paisajes montañosos y su rica biodiversidad.

Entre estas especies se encuentran caribúes, alces, cabras de montaña, osos grizzly y, en ocasiones, los amenazados caribúes de los bosques.

Los conservacionistas explican que los incendios son parte del ciclo natural del ecosistema, y que muchos animales están adaptados para lidiar con estas situaciones.

Sin embargo, los caribúes, en particular, enfrentan un futuro incierto, ya que sus hábitats han menguado debido a la actividad humana, tales como la minería, la tala de árboles y la extracción de recursos petroleros.

Tara Russell, directora de programas en la sección de Alberta del Norte de la Sociedad Canadiense de Parques y Naturaleza Silvestre, expresa su preocupación: 'Tengo mucho miedo por lo que este fuego significa para ellos'.

Actualmente, en Jasper solo permanecen dos manadas de caribúes: la manada de Brazeau, con menos de 10 individuos, y la manada de Tonquin, que cuenta con aproximadamente 50, de los cuales solo hay unas 10 hembras reproductoras.

Esto pone en evidencia la vulnerabilidad de estas especies, que ya enfrentan una alarmante disminución de sus poblaciones a nivel nacional.

La situación se vuelve aún más preocupante si se considera que el cambio climático ha provocado un incremento tanto en la frecuencia como en la intensidad de los incendios.

Aunque los caribúes son físicamente capaces de escapar del fuego, el problema radica en que sus hábitats se han reducido drásticamente.

De acuerdo con Russell, la mayor parte de su hábitat fuera del parque ha sido perturbada por el desarrollo industrial, lo que limita su capacidad de encontrar refugio durante un incendio.

'Realmente, queda muy poco de su hábitat que les permita mantener esa resistencia ante incendios ocasionales', señala.

Además de los caribúes, la fauna más grande, como los alces, también deberá encontrar nuevas áreas de pastoreo mientras los animales más pequeños, como por ejemplo, los pájaros, probablemente podrán huir volando.

En contraste, muchas especies pequeñas como los anfíbios y los pequeños mamíferos podrían no sobrevivir.

Dale Gienow, director ejecutivo de Wildnorth, una organización que se ocupa de la rescatación de la vida silvestre en el norte de Alberta, enfatiza que raramente se observan animales con lesiones directas de incendios.

Sin embargo, sí se nota un aumento en los accidentes de animales que huyen hacia áreas urbanas.

Por otro lado, en un plano más optimista, los incendios forestales también tienen el potencial de rejuvenecer el ecosistema, permitiendo que nuevas plantas crezcan y alimenten a especies como los alces y los caribúes.

A pesar de la devastación que pueden causar, los incendios pueden resultar beneficiosos para la regeneración de ciertos hábitats a largo plazo.

Así, mientras los animales adaptan su comportamiento y buscan nuevas áreas, el equilibrio ecológico del Parque Nacional Jasper también enfrenta un camino de recuperación.