Algunos canadienses están utilizando simulaciones de inteligencia artificial para reconectar con sus seres queridos fallecidos, ayudándoles en el proceso de duelo.

Algunos canadienses están utilizando la inteligencia artificial (IA) para recrear interacciones con sus seres queridos fallecidos y ayudarse en el proceso de duelo.

Desde chatbots hasta avatares, la tecnología de IA está siendo utilizada para recrear conversaciones, mensajes de texto y momentos compartidos.

Uno de los usuarios, Chris Zuger, perdió a su padre de manera repentina en 2022 y extrañaba las llamadas telefónicas, los mensajes de texto y las bromas que compartían juntos.

Ante la ausencia de su padre, Zuger recurrió al programa de IA ChatGPT para intentar recrear esas interacciones.

Zuger alimentó el programa con las conversaciones de texto que tenía con su padre y logró que ChatGPT respondiera como él lo haría.

Aunque la conversación fue breve, Zuger asegura que le ayudó a apreciar su relación con su padre y a sentir que estaba presente nuevamente.

Esta tendencia de utilizar la IA para reconectar con seres queridos fallecidos ha ido en aumento gracias a tecnologías como la realidad virtual y los generadores de imágenes de IA. Algunas personas han logrado reunirse virtualmente con sus seres queridos fallecidos, mientras que otras han creado recreaciones digitales de su apariencia.

La especialista en duelo, Cheryl-Anne Cait, afirma que no es inusual que las personas intenten mantener una conexión con sus seres queridos después de su fallecimiento.

Para muchos, esta tecnología puede ser beneficiosa directa o indirectamente, ya que les permite sentir la presencia de sus seres queridos y les brinda consuelo.

A pesar de que esta tecnología puede resultar perturbadora al principio, muchos usuarios como Zuger han encontrado beneficios en ella.

No obstante, es importante recordar que estas simulaciones de IA no son seres reales y no deben reemplazar el contacto humano y la capacidad de crear comunidad durante el proceso de duelo.

Esta nueva forma de reconexión con seres queridos fallecidos plantea preguntas éticas y emocionales, pero también ofrece oportunidades para sanar y recordar a quienes ya no están físicamente con nosotros.