El fabricante de chips Intel podría anunciar la eliminación de más del 20% de sus empleos esta semana como parte de un plan para restructurar y optimizar sus operaciones, en un intento por recuperar su competitividad en el mercado tecnológico.

Intel, uno de los principales fabricantes de semiconductores a nivel mundial, estaría preparando una importante reestructuración que podría implicar la eliminación de más del 20% de su fuerza laboral en los próximos días.
La noticia ha generado gran expectación en el sector tecnológico, ya que sería la mayor reducción de personal en la historia reciente de la compañía y una estrategia clave para afrontar los desafíos actuales del mercado.
La compañía, fundada en 1968 en Estados Unidos, ha sido durante décadas un referente en innovación en tecnología de chips y procesadores. Sin embargo, en los últimos años, ha enfrentado una serie de dificultades, incluyendo una caída en sus ventas y una pérdida de cuota de mercado frente a rivales como Nvidia y AMD en segmentos clave como los chips para inteligencia artificial y servidores.
La situación se agravó en 2022 y 2023, cuando la demanda mundial de semiconductores se vio afectada por la crisis global de suministros y la desaceleración económica.
Ante estos desafíos, Intel ha decidido implementar una profunda reestructuración bajo la dirección de su nuevo CEO, Lip-Bu Tan, quien asumió el cargo el mes pasado.
La estrategia apunta a simplificar la estructura de gestión, reducir burocracia y priorizar la innovación en ingeniería. La intención es que la compañía sea más ágil y competitiva, focalizándose en áreas donde puede destacar, como los chips para inteligencia artificial y los procesadores para centros de datos.
Se estima que la reducción de plantilla podría afectar a más de 22.000 empleados, lo que representa aproximadamente el 21% de su fuerza laboral actual, que supera las 105.000 personas. La medida sería la primera gran acción de este tipo desde que Tan tomó las riendas, y se espera que tenga un impacto significativo en la cultura corporativa y en las operaciones internas.
Históricamente, Intel ha llevado a cabo despidos en distintas etapas para ajustar su tamaño y adaptarse a las condiciones del mercado. Por ejemplo, en agosto de 2024, la compañía redujo su plantilla en unos 15.000 empleados, dejando su número total en torno a las 108.900. Sin embargo, la magnitud de la próxima reestructuración sería inédita y refleja la necesidad urgente de cambiar el rumbo para recuperar la competitividad.
Este proceso de ajuste también forma parte de un plan más amplio para que Intel se enfoque en sus fortalezas y deposite recursos en áreas estratégicas.
La compañía planea también vender activos no esenciales para concentrarse en su núcleo de innovación tecnológica. La reestructuración no solo busca reducir costos, sino también mejorar la eficiencia y acelerar el desarrollo de productos innovadores.
La noticia de posibles despidos masivos llega en un momento en que el mercado de chips en general está en plena transformación. La competencia en inteligencia artificial, computación en la nube y dispositivos conectados ha llevado a las empresas a replantearse sus estrategias.
En este contexto, Nvidia ha ganado terreno en el segmento de chips para IA, dejando a Intel en una posición de desventaja que la compañía busca revertir.
Históricamente, Intel ha sido pionera en la industria, creando innovaciones que han marcado hitos en la historia de la tecnología. Desde su fundación, ha contribuido al avance de la informática personal y la computación empresarial. Sin embargo, en los últimos años, su liderazgo ha sido cuestionado por la rapidez con la que otros competidores han avanzado en segmentos clave.
El anuncio de estos posibles despidos y cambios estructurales generará seguramente un impacto en el mercado laboral, en sus accionistas y en la industria en general.
La reestructuración, si se confirma, será una señal clara de que Intel busca adaptarse a un entorno cada vez más competitivo y dinámico, apostando por la innovación y la eficiencia para asegurar su futuro en la era de la tecnología avanzada.