Un informe reciente presenta una lista de 35 amenazas plausibles que podrían reconfigurar Canadá y el mundo en un futuro cercano, destacando la preocupación por la desinformación y la inteligencia artificial.
Un informe recién publicado por un grupo de expertos dentro del Ministerio de Empleo y Desarrollo Social de Canadá enumera 35 amenazas 'plausibles' que podrían reconfigurar Canadá y el mundo en un futuro cercano.
En la cima de la lista se encuentra la amenaza para la sociedad representada por la desinformación y la inteligencia artificial.
El informe elaborado por el panel de Política Horizons Canada (PHC) destaca que en tan solo tres años, el 'ecosistema de información' mundial podría estar inundado de desinformación creada tanto por personas como por inteligencia artificial (IA), lo que podría aumentar la desconfianza y fragmentación social.
En términos medioambientales, la posible extinción de especies debido a la pérdida de biodiversidad y eventos climáticos extremos que superen nuestra capacidad de respuesta también figuran entre las principales amenazas.
La IA, según el informe, podría tener consecuencias impredecibles en el futuro, con ciberataques que podrían deshabilitar infraestructuras críticas y la influencia de multimillonarios para usar su poder y controlar recursos naturales y activos estratégicos.
La manipulación generada por la IA, advierte el informe, podría fragmentar a las poblaciones nacionales.
Además, se destaca la posibilidad de escasez generalizada de recursos vitales como agua, arena y minerales críticos en los próximos años, lo que podría tener un impacto en la salud humana y la estabilidad social.
En cuanto a la movilidad social descendente, con la vivienda cada vez más inasequible y acuerdos laborales más precarios, las condiciones socioeconómicas para los canadienses podrían disminuir de una generación a la siguiente.
La amenaza a las democracias también se evidencia en el informe, destacando la posibilidad de una lucha entre ideologías autoritarias y democráticas.
La conciencia sobre estas amenazas futuras puede ayudar a los gobiernos a prepararse y mitigar riesgos, aunque el informe reconoce que no todas las perturbaciones son garantizadas, pero sí plausibles.