La Primera Nación Grassy Narrows ha presentado una demanda contra los gobiernos provincial y federal de Canadá, alegando que han fallado en proteger sus derechos según el Tratado 3. La demanda se basa en la contaminación de mercurio en el sistema del río English-Wabigoon, que ha empeorado debido a la contaminación industrial.

La contaminación en el sistema del río se remonta a la década de 1960 y 1970, cuando una fábrica de papel en el noroeste de Ontario vertió aproximadamente nueve toneladas de mercurio en el agua.

Generaciones de personas han consumido pescado del río, lo que ha provocado síntomas de envenenamiento por mercurio en alrededor del 90 por ciento de la comunidad de aproximadamente 1,000 personas.

La Primera Nación Grassy Narrows busca restaurar el medio ambiente y recibir compensación por los daños causados.

A pesar de los compromisos anteriores de los gobiernos, como la construcción de un Hogar de Atención para el Mercurio y fondos para la limpieza del mercurio, la contaminación en el río sigue siendo un problema.

En respuesta a la demanda, la ministra de Servicios Indígenas de Canadá, Patty Hajdu, reconoció la frustración de Grassy Narrows y destacó la importancia de abordar este tipo de 'racismo ambiental'. El líder del NDP federal, Jagmeet Singh, también instó a Canadá a asumir la responsabilidad por el envenenamiento por mercurio.

La demanda de Grassy Narrows busca restaurar su 'modo de vida', que ha sido afectado por décadas de contaminación.

Aunque no se ha especificado una cantidad exacta de compensación, se espera que la comunidad reciba apoyo financiero y social para restaurar su salud y bienestar.

La demanda de Grassy Narrows es un recordatorio del impacto duradero de la contaminación industrial en las comunidades indígenas, y la necesidad de responsabilizar a los gobiernos por sus acciones pasadas y presentes.