Investigadores en Canadá trabajan en la creación de un trigo que pueda resistir la sequía, un avance crucial para la seguridad alimentaria
Los científicos de Canadá, liderados por el biólogo de plantas Marcus Samuel, están inmersos en la búsqueda de un trigo resistente a la sequía, un logro que se considera clave para la seguridad alimentaria a nivel mundial.
Samuel lleva más de una década trabajando en mejorar la resistencia climática de los cultivos.
A pesar de haber centrado su esfuerzo en canola, guisantes y otros cultivos, la parte más esquiva y emocionante de su labor es la búsqueda de un trigo resistente a la sequía.
Se ha descubierto que las plantas de trigo con ciertos atributos, como raíces más largas y profundas, tienen una mayor probabilidad de sobrevivir en condiciones de escasez de agua.
Sin embargo, el proceso de desarrollo de un trigo verdaderamente tolerante a la sequía sigue siendo lento y complejo.
Actualmente, Canadá produce anualmente un promedio de más de 25 millones de toneladas de trigo y exporta alrededor de 15 millones de toneladas.
El cambio climático ha provocado un descenso en la producción de trigo en el país, lo que resalta la urgencia de encontrar soluciones.
La urgencia de esta situación ha llevado a que se relajen las regulaciones en torno a los cultivos editados genéticamente en Canadá, lo que podría acelerar el proceso de desarrollo de trigo resistente a la sequía.
Sin embargo, a pesar de los avances, la aprobación y comercialización efectiva de un nuevo cultivo requiere varios años de pruebas y trabajo regulatorio.
Es fundamental que los científicos reciban el financiamiento necesario para avanzar lo más rápidamente posible en esta importante tarea para la agricultura mundial.