La llegada de un cachalote enano a la costa de Terranova ha proporcionado una valiosa oportunidad de estudio para los científicos, revelando detalles sobre este escaso cetáceo.
Una rareza marina ha inquietado a los científicos tras el hallazgo de un cachalote enano en la costa de la Península de Avalon, en Terranova, durante la semana pasada.
La especialista Julie Huntington, del grupo de Liberación de Ballenas y Varamientos de la provincia, comentó que durante el proceso de análisis del cetáceo fallecido, se liberó tinta como mecanismo de defensa del animal.
Esta especie, generalmente presente en mares templados y tropicales, es reconocible por su cabeza cuadrada y una fila inferior de dientes afilados y curvados.
Según Huntington, este avistamiento es extremadamente raro en Terranova y Labrador.
“Es el tercero con el que hemos trabajado en los últimos 40 años”, afirmó en una entrevista.
Huntington, junto a sus colegas Cateline Landry y Maria Peddle, realizó la necropsia del cetáceo en la playa de Portugal Cove South, el lugar donde varó. La extracción de información sobre cómo murió el animal fue el objetivo principal del análisis.
Durante la necropsia, descubrieron una gran cantidad de tinta espesa en su intestino inferior, la cual, según explicaron, es un mecanismo de defensa natural del cachalote.
“Cuando se siente amenazado, el animal puede excretar esta tinta, creando una nube en el agua que lo ayuda a escapar de depredadores como los tiburones”, añadió Huntington.
Sin embargo, al realizar la intervención, la tinta se derramó sobre ellos, cubriéndolos de una sustancia negra y viscosa con la que tuvieron que lidiar en el mar.
El varamiento ocurrió cerca de la Reserva Ecológica de Mistaken Point.
Huntington recibió la alerta sobre el avistamiento por parte del intérprete Lukas Ward, quien describió al cetáceo y envió una foto del mismo.
Una vez en la playa, el equipo del que formaba parte llevó a cabo mediciones y tomó muestras, incluyendo dientes que fueron enviados a científicos de Pesca y Océanos de Canadá. Estos dientes son cruciales para determinar la edad del animal y obtener información sobre su salud a lo largo del tiempo.
En la actualidad, se desconoce gran parte de la historia del cachalote y las circunstancias que llevaron a su varamiento.
Huntington observó que el animal presentaba numerosos daños en su cabeza, que pudieron haber ocurrido en su camino hacia la costa, donde hay rocas justo en la orilla.
“No son animales que normalmente se exhiben.
Cuando lo hacen es por una razón”, explicó.
Investigaciones adicionales revelaron que el maxilar del cachalote estaba roto, lo cual podría haber sido un factor que lo llevó a la playa.
Además, su estómago estaba vacío, algo que no es inusual, ya que los cachalotes enanos tienden a regurgitar su alimento al llegar a tierra.
Sin embargo, también notaron que no había contenido en los intestinos.
Se sospecha que alguien pudo haber intentado devolver el cachalote a la mar, lo cual Huntington desaconseja.
Aunque las intenciones pueden ser buenas, el intento de retorno no es recomendable y puede causar más daño al animal.
Finalmente, después de concluir la necropsia, el cuerpo del cetáceo fue dejado en la playa, donde eventualmente será parte de la cadena alimentaria de organismos de fondo, contribuyendo al ciclo vital del océano.
Huntington concluyó explicando que este proceso es fundamental para la salud del ecosistema marino, ya que muchas criaturas dependen de organismos como los cetáceos en su ciclo de vida.