Un biólogo de Nueva Escocia está adaptando una tecnología utilizada en la pandemia para proteger a las ostras de los efectos del calentamiento de las aguas.

Un biólogo de la Universidad de Cape Breton en Nueva Escocia está utilizando una tecnología utilizada para mantener a las personas seguras en la pandemia con el objetivo de proteger a las ostras de los efectos del calentamiento de las aguas.

El biólogo Rod Beresford está adaptando una tecnología de prueba rápida para detectar parásitos, la misma tecnología que ayudó a detectar el COVID-19 en las aguas residuales, para monitorear la amenaza del parásito Perkinsus marinus, conocido como 'dermo'. Aunque el dermo aún no se encuentra en Canadá, los investigadores señalan que esto podría cambiar a medida que las temperaturas del océano alrededor de la provincia alcanzan máximos históricos.

El monitoreo de esta enfermedad forma parte de un esfuerzo de los científicos para ayudar a las ostras y a los cultivadores de ostras de la región a prepararse para los efectos del cambio climático.

La investigación de Beresford se ha centrado en el MSX, otro parásito invasor que ha causado estragos en la producción de ostras en el lago Bras d'Or.

Sin embargo, ahora también está investigando el dermo, que considera igual de destructivo, si no más.

El dermo ataca los tejidos de las ostras y una vez que se ingiere, puede proliferar en las células sanguíneas y eventualmente matar al animal.

Beresford ha estado adaptando una prueba de ADN para detectar el protozoo del dermo, utilizando muestras positivas de dermo provenientes de Virginia en los Estados Unidos.

Las pruebas han mostrado resultados prometedores en productores de ostras del área de Yarmouth este verano.

Además, se está utilizando una prueba rápida desarrollada por la compañía canadiense LuminUltra, la cual originalmente se ideó para monitorear el COVID-19 en las aguas residuales.

La propagación del dermo es un tema relevante, ya que estudios en Estados Unidos han sugerido que el dermo puede evolucionar y adaptarse a nuevas condiciones, lo que puede tener consecuencias inesperadas.

La evolución del dermo en el pasado ha sido atribuida a la llegada del MSX a las costas este de Estados Unidos, lo que obligó al dermo a volverse más virulento para competir y matar a las ostras en cuestión de meses.

Además, otros investigadores están explorando la crianza selectiva como una forma de aumentar la resistencia de las ostras a las enfermedades.

Martin Mallet, dueño de una empresa de cultivo de ostras en New Brunswick, está llevando a cabo un programa de crianza selectiva para producir ostras más resistentes y adaptadas a las condiciones de la acuicultura.

Este programa podría ayudar a los productores a enfrentar nuevas enfermedades en el futuro.

En resumen, el biólogo de Nueva Escocia, Rod Beresford, está adaptando una tecnología de prueba rápida utilizada en la pandemia para monitorear el dermo, una enfermedad que amenaza a las ostras.

Esta tecnología podría ayudar a los productores de ostras a prepararse y limitar la propagación de la enfermedad.

Al mismo tiempo, otros investigadores están explorando la crianza selectiva como una forma de aumentar la resistencia de las ostras a las enfermedades.

Estos esfuerzos buscan proteger la industria de las ostras y garantizar su supervivencia en el contexto del cambio climático.