El Instituto Tecnológico Buenos Aires avanza en electromovilidad con un revolucionario cargador inalámbrico, que utiliza energía solar para recargar vehículos eléctricos sin necesidad de cables.
El Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), reconocido por su capacidad de innovación y su compromiso con el desarrollo de soluciones tecnológicas, ha presentado su más reciente avance en el ámbito de la electromovilidad: un cargador inalámbrico para vehículos eléctricos.
Este sistema, que se destaca por su exclusividad y su potencial para transformar la recarga de baterías, no requiere enchufes ni cables y utiliza energía regenerativa obtenida de paneles solares.
Con 65 años de trayectoria, el ITBA ha sido el hogar de múltiples innovaciones, entre las que se incluyen el lanzamiento de un satélite, un cohete reutilizable y diversas aplicaciones de inteligencia artificial como un algoritmo para el diagnóstico del cáncer.
En términos de movilidad, uno de sus desarrollos más notables es un autobús autónomo, que se desplaza sin conductor por el Parque de la Innovación en Buenos Aires.
El nuevo cargador inalámbrico fue probado en un karting eléctrico, proyecto que fue desarrollado por alumnos y docentes del instituto.
Utiliza una tecnología conocida como Transferencia de Potencia Inductiva Resonante (RIPT), que facilita la carga a través de un campo magnético.
Durante la recarga, no es necesario que el conductor se baje del vehículo, y el sistema asegura un 93% de eficiencia en la transferencia energética.
Nicolás Magliola, ingeniero electrónico del ITBA y líder del proyecto, explica: “La idea es enfrentar los retos que presentan los vehículos eléctricos, específicamente el modo y los tiempos necesarios para la recarga de una batería.” Con este sistema, los vehículos pueden cargar sus baterías mientras están en uso, eliminando la necesidad de llevar una gran capacidad de batería.
Por cada segundo que el karting se detiene en la plataforma de carga, obtiene 100 metros de autonomía, lo que equivale a aproximadamente 6 kilómetros por un minuto de carga.
El diseño del sistema de carga es conveniente desde el punto de vista de la infraestructura; el receptor se integra en el vehículo y el transmisor se instala en la vía pública.
Esto significa que no sólo se minimizarían problemas de vandalismo, sino que también podrían adaptarse estéticamente al entorno urbano.
De hecho, se podría instalar en puntos estratégicos, como en los semáforos, permitiendo que los vehículos se carguen durante las detenciones.
El equipo que lleva a cabo esta avanzada iniciativa está formado por aproximadamente 15 estudiantes de diversas disciplinas de ingeniería.
Magliola asegura que este proyecto no es solo una demostración, sino una realidad operante: “Hemos estado trabajando en esto durante dos años.”
La versatilidad del sistema es notable, ya que puede adaptarse a otras fuentes de energía, como la red eléctrica o la energía eólica.
En el futuro, ya están planificando adaptar el sistema del karting a un monopatín eléctrico, abriendo la posibilidad a su implementación en vehículos de calle.
Por otro lado, se encuentran en conversaciones para integrar esta tecnología en el autobús autónomo que ya está operativo en el Parque de la Innovación.
Este proyecto no solo representa un avance significativo en tecnología de carga para vehículos eléctricos, sino que también se enmarca dentro de una tendencia global hacia la sostenibilidad y la movilidad inteligente.
La integración de estas soluciones tecnológicas refleja el compromiso del ITBA y sus estudiantes en abordar los desafíos del futuro de la movilidad urbana.