La marca china Kaiyi debuta en el mercado argentino con su SUV compacto Kaiyi X3, buscando destacar en un segmento cada vez más competitivo.

Kaiyi, una nueva marca de automóviles originaria de China, ha iniciado sus operaciones en Argentina, convirtiéndose en la décima octava automotriz en ingresar al mercado local desde que Chery empezó su camino en 2008.
Aunque Kaiyi forma parte del conglomerado Chery a nivel global, en el país está representada por Famly Argentina, anteriormente conocida como Lifan, que también opera con otras marcas como Jetour, dedicada a SUVs, y KyC Mamut, especializada en minitrucks.
Es importante señalar que Famly ya no ofrece vehículos de la marca Faw en su catálogo.
El lanzamiento de Kaiyi ha traído consigo un nuevo modelo, el SUV compacto X3. Este vehículo, que sucede al Chery Tiggo 4 PRO, presenta un diseño actualizado y cuenta con dimensiones que lo posicionan estratégicamente en un segmento muy competido.
Con una altura moderada y un estilo moderno tanto en el interior como en el exterior, el X3 se ofrece en una única versión que ya se encuentra disponible en los concesionarios al precio de 33.500.000 pesos argentinos, lo que equivale aproximadamente a 32.200 euros, según el tipo de cambio actual.
Este modelo está equipado con neumáticos de 215/55, montados en llantas de 18 pulgadas, lo que le otorga una apariencia robusta y un manejo sólido.
En cuanto a sus dimensiones, el Kaiyi X3 mide 4.40 metros de largo, 1.83 metros de ancho y 1.65 metros de alto, además de contar con una distancia entre ejes de 2.63 metros y un espacio en el maletero de 342 litros, cifra comparable al Tiggo 4 PRO.
Bajo el capó, el X3 aloja un motor naftero de 1.5 litros, que cuenta con 4 cilindros y 16 válvulas, generando una potencia de 116 caballos de fuerza. Este motor se acompaña de una caja de cambios automática CVT (transmisión variable continua), siendo la tracción delantera.
El interior del vehículo destaca por su modernidad, con dos pantallas de 10.25 pulgadas, que ofrecen una interfaz digital tanto para el tablero de instrumentos como para el sistema multimedia. Además, cuenta con tapizados de cuero ecológico y equipamiento que incluye arranque sin llave, control de velocidad crucero, sensores de estacionamiento traseros, cámara de marcha atrás, aire acondicionado con salidas traseras y cierre centralizado.
Sin embargo, en el apartado de seguridad, solo incluye dos airbags frontales, a pesar de tener otros sistemas como monitor de presión de neumáticos y asistente para arranque en pendiente.
El Kaiyi X3 se enfrentará a competidores directos en el mercado de SUV chinos, tales como el Chery Tiggo 4 PRO, cuya versión inicial está disponible a unos 24.000 euros, el JAC S4 con un precio de aproximadamente 26.000 euros, y el DFSK Glory 500, que se ofrece a 29.800 euros. La llegada de Kaiyi al país no solo representa una nueva opción para los consumidores argentinos, sino también un giro en la evolución del sector automotriz en Argentina, donde los coches chinos han pasado de un estigma de bajo costo y baja calidad a ser una referencia tecnológica en menos de dos décadas.