Los precios de los vehículos nuevos en Argentina continúan en aumento, con incrementos que afectan tanto a modelos económicos como a los más populares. En 2025, los cambios en las listas de precios reflejan una tendencia alcista impulsada por variaciones en el dólar y la inflación, provocando que los autos más económicos se acerquen o superen los 30.000 euros.

Tras un fuerte ajuste en agosto, que llevó los incrementos por encima del 10%, septiembre también mostró subas, aunque en menor medida, alcanzando entre el 0,5% y el 5% en las principales marcas del mercado.
Hasta hace dos meses, los incrementos en los #precios de los vehículos venían siendo menores que la #inflación y la devaluación del peso frente al dólar, pero esta tendencia cambió cuando la moneda estadounidense se acercó a los 1.400 pesos argentinos, límite establecido por el gobierno. Esto generó un impacto directo en los precios de los #autos y en los patentamientos correspondientes a agosto, que si bien mostraron un crecimiento del 31,7% respecto del año anterior, cayeron un 13% en comparación con julio.
En lo que va de 2025, se han vendido aproximadamente 444.041 autos 0 km en Argentina, un incremento notable del 65,6% en términos interanuales. Sin embargo, los modelos más económicos, que constituyen el segmento de mayor volumen del parque automotor, han visto cómo sus precios se han disparado en los últimos meses.
Actualmente, ningún modelo de los más accesibles cuesta menos de 2.350.000 euros. En septiembre, por ejemplo, los autos más baratos, como el Renault Kwid y el Fiat Mobi, se situaban en torno a los 2.120.000 euros y los 2.230.000 euros, respectivamente. Hoy, debido a los incrementos mensuales que oscilan en promedio entre 70.000 y 100.000 euros, estos vehículos se acercan peligrosamente a los 2.800.000 euros, y muchos modelos de la lista más económica están próximos a superar los 3.000.000 de euros.
Entre las marcas más populares del mercado nacional, todos salvo Volkswagen tienen modelos en el ranking de los 10 autos más económicos. Los modelos que encabezan esta lista son:
1. Renault Kwid: 22.160 euros
El modelo más barato del mercado, que en agosto costaba aproximadamente 21.100 euros, aumentó un 5,6% en septiembre. Equipado con un motor tricilíndrico 1.0 litros de 66 caballos, caja manual de cinco velocidades y mejoras en equipamiento, incluyendo control de estabilidad y conectividad, el Kwid también ofrece una versión eléctrica (Kwid E-Tech) por alrededor de 28.860 euros.
2. Fiat Mobi: 24.096 euros
El modelo más económico de Fiat mostró uno de los menores incrementos de solo 0,5%, alcanzando los 24.096 euros. Este coche, con motor 1.0 de 70 caballos y caja manual de cinco velocidades, presenta ahora una versión Trekking con un diseño más aventurero.
3. Hyundai HB20: 25.400 euros
Con precios que parten de los 25
El compacto brasileño subió un 3,25% desde agosto, con precios que parten de los 25.400 euros en su versión base, equipado con un motor 1.6 de 123 caballos y transmisión manual o automática. La versión más equipada ronda los 32.200 euros, con sistemas avanzados de asistencia a la conducción.
Otros modelos en la lista, como el JAC S2, Chevrolet Onix, Citroën C3, Fiat Argo, Fiat Cronos y Toyota Yaris, también han experimentado incrementos en sus precios, que en algunos casos superan el 6%.
El JAC S2, importado desde China, mantiene su precio en torno a los 19.900 euros, aunque en pesos argentinos se ha incrementado notablemente, superando los 21.900 euros.
Por ejemplo, el Chevrolet Onix (y su versión sedán, Onix Plus), tras una renovación estética y tecnológica, ahora supera los 27.477 euros, con aumentos del 7,5%. Incluye versiones con motor turbo 1.0 de 116 caballos y caja automática o manual. En su segmento, sigue siendo uno de los favoritos del mercado nacional.
El mercado argentino continúa mostrando una tendencia de aumento de precios que impacta directamente en la accesibilidad a los autos nuevos, especialmente en el segmento de los económicos, que en 2025 ha visto cómo sus valores se acercan peligrosamente a los 30.000 euros. Este fenómeno no solo refleja las condiciones macroeconómicas del país, sino también la fuerte dependencia de los cambios en el tipo de cambio y la inflación, que en conjunto generan una tensión constante en el #mercado automotor local.