El proyecto Pistachomad busca analizar las propiedades del pistacho y desarrollar propuestas gastronómicas para apoyar a las empresas agrícolas.
En la Comunidad de Madrid, las autoridades han puesto en marcha una investigación innovadora sobre el pistacho, un fruto seco que está ganando terreno en el panorama agrícola español.
El Gobierno autonómico ha lanzado el proyecto Pistachomad, que tiene como objetivo explorar y ampliar los usos culinarios del pistacho, evaluando las propiedades nutricionales de sus diferentes variedades.
Este importante proyecto cuenta con la colaboración de tres expertos culinarios y un equipo especializado que trabaja en el Centro de Investigación Gastronómica del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA), junto con la participación activa de empresas y cooperativas del sector.
La investigación no solo se centra en las cualidades organolépticas del pistacho, sino también en los efectos que los procesos como el tostado y la fermentación tienen sobre sus características.
Uno de los aspectos más interesantes de este proyecto es el análisis de las cáscaras y cascarillas del pistacho, buscando maneras de aprovechar estos subproductos en la cocina.
Además, se están desarrollando propuestas gastronómicas que integran este fruto seco, y se estudia su valor nutricional para incrementar su visibilidad en la gastronomía regional.
Como parte de sus esfuerzos para promover el pistacho como un recurso culinario valioso, se están realizando estudios para entender la aceptación, preferencia e interés de compra entre grupos de consumidores locales.
Esto es fundamental para impulsar su presencia en el mercado y fomentar su consumo en diversas elaboraciones.
En el marco de este proyecto, el IMIDRA también ha comenzado cultivos experimentales de pistacho en la comarca agrícola de Lozoya-Somosierra.
Estos cultivos han brindado datos relevantes sobre el crecimiento del árbol, su resistencia a las heladas primaverales y el rendimiento de las cosechas.
En total, la superficie sembrada de pistacho ha crecido un 30% entre 2019 y 2024, alcanzando las 830 hectáreas, lo que lo convierte en el quinto fruto más cultivado en la Comunidad de Madrid.
A medida que avanza el proyecto, se continúa la investigación para identificar la variedad de pistacho más adecuada para el norte de la región, una zona que, a pesar de sus bajas temperaturas, presenta un enorme potencial para la producción de este fruto seco.
Es relevante destacar que España se perfila como el cuarto productor mundial de pistacho, lo que enfatiza la importancia de este cultivo en el contexto agrícola nacional.
En resumen, la Comunidad de Madrid está realizando un esfuerzo significativo para investigar y promover el pistacho no solo como un producto agrícola, sino como un ingrediente clave en la cocina moderna, contribuyendo a la economía local y al desarrollo de la gastronomía madrileña.