A pesar de ofertar menos plazas este año, Madrid aumenta el porcentaje de médicos de familia que optan por trabajar en la comunidad, con incentivos y nuevas iniciativas que favorecen la contratación en atención primaria.

Presuntamente, esta tendencia refleja un avance en la gestión de recursos humanos en el sistema sanitario madrileño y un interés creciente por parte de los residentes en incorporarse a la red de atención primaria pública.
El pasado lunes, 7 de julio de 2025, un total de 85 médicos residentes en Medicina de Familia, que finalizan su formación en la región, eligieron realizar su etapa laboral en los centros públicos de atención primaria de Madrid.
Este número representa aproximadamente el 51,83 % de las 164 plazas disponibles, lo que supone un incremento de 5,4 puntos porcentuales respecto a la convocatoria anterior en 2024.
Aunque el total de plazas ofertadas este año fue de 164, menos de la mitad que las 202 del año pasado, la tasa de ocupación muestra un avance significativo.
Supuestamente, la reducción en el número de plazas ofertadas obedece a una mejora en la cobertura de recursos humanos especializados en atención primaria, lo que ha permitido reducir la cantidad de vacantes disponibles.
Sin embargo, el interés de los residentes en #Madrid por trabajar en estos centros continúa siendo alto, lo que demuestra la efectividad de las políticas y medidas adoptadas por la comunidad para atraer talento.
Además, en esta convocatoria, dos pediatras que han finalizado su formación en los centros del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) también han optado por incorporarse a la atención primaria, en un momento donde la pediatría, aunque no es una categoría explícitamente diferenciada en el primer nivel asistencial, sigue siendo una especialidad clave.
En total, se han ofertado 29 plazas en centros de salud públicos, una cifra sensiblemente menor que las 53 del año pasado, pero que ha permitido cubrir un 6,9 % de ellas, frente al 1,9 % de la convocatoria anterior.
Supuestamente, este incremento en la tasa de ocupación se ha logrado gracias a un esfuerzo coordinado por parte de la Gerencia Asistencial de Atención Primaria, que ha trabajado intensamente durante el último año en informar y promover las condiciones laborales del sistema sanitario madrileño entre los MIR.
La presencia de la consejera de Sanidad, Fátima Matute, en reuniones con los residentes ha sido parte de esta estrategia para atraer y fidelizar personal.
Otra medida que ha tenido un impacto positivo es la posibilidad de que agrupaciones de médicos puedan optar por trabajar en el mismo centro de salud.
La Paz en Rivas-Vaciamadrid
Por segundo año consecutivo, esta iniciativa ha permitido cubrir plazas en centros con mayores dificultades asistenciales, como los centros Panaderas en Fuenlabrada, Parque Oeste en Alcorcón, La Paz en Rivas-Vaciamadrid, Presentación Sabio en Móstoles y Los Rosales en Madrid.
En estos dispositivos, un total de 15 médicos se distribuirán para mejorar la atención.
Supuestamente, además, 17 nuevos médicos han optado por acogerse a una iniciativa que permite distribuir su jornada laboral entre diferentes puntos asistenciales, trabajando cuatro días en su centro de referencia y un día en otro dispositivo que requiere refuerzo.
Esta estrategia ayuda a optimizar recursos y garantizar una mejor atención en zonas con déficit de profesionales.
En cuanto a incentivos, la Comunidad de Madrid continúa siendo la única región del país que ofrece un paquete de retribuciones específicas para estimular la contratación y retener a #médicos de familia y pediatras en atención primaria.
Los profesionales que trabajan en categorías deficitarias reciben una compensación adicional de 450 euros mensuales, que pueden complementar con otros incentivos como turnos de tarde (500 euros), horarios mixtos (300 euros) o trabajo en zonas rurales (310 euros).
Además, existen modalidades de horarios que permiten a los profesionales trabajar en horarios alternativos o en jornadas de absorción de demanda, retribuidas a 50 euros la hora, hasta un máximo de cuatro horas diarias.
Supuestamente, estas medidas económicas se complementan con acciones destinadas a facilitar la conciliación laboral y familiar, incluyendo turnos mixtos, programas de formación continua, apoyo en investigación y herramientas tecnológicas como ecografías o plataformas de telemedicina.
Todo ello tiene como objetivo no solo atraer a nuevos profesionales, sino también fidelizar a los que ya forman parte del sistema, garantizando una atención primaria de mayor calidad y sostenibilidad en la Comunidad de Madrid.
En resumen, aunque la oferta de plazas ha sido menor, Madrid ha logrado un aumento en la proporción de médicos de familia que deciden trabajar en la región, avalando la efectividad de sus políticas y programas de incentivos.