Informes sobre el servicio de atención paliativa en domicilios de la Comunidad de Madrid y su impacto en la vida de los pacientes y sus familias.
En el año 2023, la Comunidad de Madrid brindó atención a un total de 8.748 pacientes, ya sea en sus hogares o en centros residenciales.
Estas personas, debido a enfermedades crónicas avanzadas y progresivas, se encuentran con una grave reducción de su autonomía.
De estos casos, aproximadamente un 70% se relacionan con pacientes que sufren de procesos oncológicos, mientras que el 30% restante corresponde a otras enfermedades, como es la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), que acogió a 108 usuarios en este año.
Los Equipos de Soporte de Atención Paliativa Domiciliaria (ESAPD) de Atención Primaria, que celebran su 25 aniversario, han destacado no solo por la atención médica prestada, sino también por el apoyo integral que ofrecen a familiares y cuidadores, particularmente en momentos de duelo.
Este enfoque humanizado es fundamental para mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus seres queridos, ya que el proceso de enfrentar una enfermedad terminal es una experiencia desgastante emocionalmente.
La directora general Asistencial, Almudena Quintana, presentó estos datos en un evento que conmemoró la creación de los ESAPD en 1999. En la actualidad, este servicio está presente en todas las áreas sanitarias de la comunidad, contando con un total de 11 dispositivos ubicados en centros de salud.
Inicialmente, el equipo estaba compuesto por unos 15 profesionales, y en la actualidad cuenta con un total de 114, distribuidos entre médicos, enfermeros, auxiliares, administrativos y trabajadores sociales.
Esta multiplicación de recursos refleja el creciente reconocimiento y la importancia de los cuidados paliativos en la sanidad pública.
Además, los ESAPD han incorporado tecnología avanzada para mejorar su atención domiciliaria.
Herramientas como ecógrafos portátiles permiten que los médicos evalúen rápidamente la salud del paciente y dispositivos para realizar analíticas en el hogar ofrecen resultados inmediatos.
Esta innovación es esencial para la detección temprana de complicaciones y para un manejo más efectivo de los síntomas.
La labor de los ESAPD también incluye tareas formativas.
Estudiantes de medicina y enfermería, así como residentes de la especialidad Familiar y Comunitaria, tienen la oportunidad de rotar por estos equipos, lo que contribuye a una formación de calidad centrada en la atención a pacientes en situación terminal.
Los cuidados paliativos en la Comunidad de Madrid tienen sus raíces en la década de 1990, cuando se implementó un modelo que integraba la atención primaria con los servicios hospitalarios.
En 1998, se llevó a cabo una prueba piloto en tres zonas sanitarias, y un año más tarde se establecieron formalmente los equipos de ESAPD, marcando el inicio de un programa que ha ido en constante expansión.
En 2010, se creó la Unidad de Atención Paliativa Continuada (Pal24), que ofrece servicios de 24 horas, demostrando el compromiso de la Comunidad de Madrid para asegurar que los pacientes en el tramo final de sus vidas reciban la atención digna y compasiva que merecen.