La Comunidad de Madrid regula el uso de ahumadores para garantizar la seguridad en la apicultura y prevenir incendios.

Imagen relacionada de control ahumadores incendios madrid

La Comunidad de Madrid ha implementado medidas para prevenir incendios en su territorio a través del control del uso de ahumadores en aproximadamente 17,000 colmenas, distribuidas en 446 explotaciones apícolas.

Esto forma parte de un esfuerzo más amplio bajo el Plan Especial de Protección Civil de Emergencia por Incendios Forestales (INFOMA), que establece diversos requisitos para la utilización de estos dispositivos por parte de los apicultores.

La Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 (ASEM112) juega un papel fundamental en este proceso, ya que es la responsable de expedir las autorizaciones necesarias para que los apicultores puedan operar con seguridad durante esta época del año, cuando el riesgo de incendios puede aumentar.

Actualmente, existen alrededor de 320 permisos activos que han sido emitidos por la Dirección General de Emergencias.

Gracias a la rigurosa capacitación y precaución que mantienen estos profesionales, no se han reportado incendios vinculados al uso de ahumadores en los últimos años.

Los ahumadores son herramientas esenciales para los apicultores, que les permiten acercarse a las abejas sin poner en peligro ni a los insectos ni a ellos mismos, ya que generan humo que calma a las abejas.

Sin embargo, su uso conlleva riesgos que deben ser gestionados con cuidado.

Por ejemplo, se les exige a los apicultores eliminar cualquier elemento inflamable en las cercanías, realizar la quema siempre dentro del ahumador y evitar las horas más calurosas del día, donde el riesgo de incendio es mayor.


Además, los apicultores deben asegurarse de que el aparato esté dotado de una rejilla para evitar que salten chispas, y deben apagar adecuadamente todos los rescoldos.

En condiciones climáticas normales, las operaciones de ahumado se llevan a cabo entre el amanecer y las 11 de la mañana.

Sin embargo, si un apicultor necesita extender este horario, debe consultar previamente al Cuerpo de Bomberos de la comunidad, siempre que el riesgo de incendio sea bajo en la previsión del día.

La región de Madrid cuenta actualmente con un total de 16,912 colmenas esparcidas en 138 municipios, lo que resulta en una producción anual de más de 230 toneladas de miel.

Esta producción no solo es vital para la economía local de los apicultores, sino que también juega un papel importante en la polinización de diversas plantas y flores, contribuyendo a la salud del ecosistema regional.

La apicultura, en su esencia, no solo es una actividad económica, sino que también es un pilar para la biodiversidad y la sostenibilidad del medio ambiente.

Por ello, la regulación y el control del uso de ahumadores son cruciales para seguir protegiendo tanto a los apicultores como el entorno natural de la Comunidad de Madrid.