El Departamento de Justicia de EE.UU ha presentado cargos contra tres personas acusadas de dirigir una red de prostíbulos de lujo en los suburbios de Washington y Boston, y ha revelado una investigación sobre cientos de clientes de alto perfil que pagaron por servicios sexuales.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha anunciado cargos contra tres personas acusadas de dirigir una “red de prostíbulos de lujo” en los suburbios de Washington y Boston y ha dado a conocer una investigación sobre potencialmente cientos de clientes de alto perfil que pagaron por servicios sexuales.
“Son médicos, abogados, contadores, funcionarios electos, ejecutivos de empresas de alta tecnología y farmacéuticas, oficiales militares, contratistas gubernamentales, profesores y científicos”, dijo Joshua Levy, el fiscal estadounidense en funciones en Boston, en una conferencia de prensa.
Los fiscales no han revelado los nombres de ninguno de los clientes.
Los fiscales tampoco revelaron los nombres de los clientes “de lujo” de las operaciones de prostitución en Washington y Boston.
El esquema de prostitución se llevaba a cabo a través de al menos dos sitios web que anunciaban citas con mujeres asiáticas, uno de los cuales pretendía ser un servicio de modelaje desnudo para fotógrafos profesionales, según un expediente de un agente especial del Departamento de Seguridad Nacional presentado en la Corte del Distrito de Estados Unidos en Boston.
Los tres sospechosos, quienes fueron arrestados, son Han Lee, de 41 años, de Cambridge, Massachusetts; Junmyung Lee, de 30 años, de Dedham, Massachusetts; y James Lee, de 68 años, de Torrance, California.
Se les acusa de utilizar “tácticas coercitivas” para atraer a las mujeres a proporcionar servicios sexuales, por los cuales se cobraba a los clientes entre 350 y 600 euros por hora.
Las reuniones se llevaban a cabo en apartamentos de lujo en suburbios adinerados de Washington y Boston, incluyendo Fairfax y Tysons Corner en Virginia, y Cambridge y Watertown en Massachusetts.
Algunas de las propiedades estaban alquiladas a nombre de Han y Junmyung, según el expediente del agente de seguridad nacional.
“Las trabajadoras sexuales solo tenían que presentarse, trabajar por sexo y recibir pago”, dijo el agente especial Zachary Mitlitsky en el expediente.
“Todos los demás aspectos de reclutamiento y concertación de citas con clientes y búsqueda de un lugar para que se llevara a cabo el acto sexual comercial eran responsabilidad de la red de prostitución y los cómplices”.
Debido a los precios de los servicios, los apartamentos de lujo y las profesiones de los clientes, el agente supuso que las operaciones eran de gama alta.
Añadió que a menudo las mujeres eran trasladadas a través de las fronteras estatales para ejercer la prostitución.
