Linda Sun y su esposo enfrentan cargos penales por supuesta acción encubierta para el gobierno chino mientras trabajaban en la administración estatal.
Nueva York: Una exasistente de la Gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha sido acusada el pasado martes de actuar secretamente como agente del gobierno chino, recibiendo a cambio millones de euros en compensación y obsequios, que incluían cenas con pato gourmet.
Linda Sun, de 41 años, y su esposo Chris Hu, de 40, se declararon no culpables de los cargos criminales ante la jueza Peggy Kuo en Brooklyn, después de ser arrestados esa misma mañana.
Los fiscales federales de Brooklyn informaron que durante su tiempo en el gobierno estatal, Sun bloqueó encuentros entre representantes del gobierno taiwanés y funcionarios de Nueva York, además de intentar organizar una visita de un alto funcionario estatal a China.
A cambio de estos servicios, se alega que los representantes del gobierno chino facilitaron millones de euros en transacciones a Hu, quien tenía actividades comerciales en el país asiático.
Entre las compras realizadas con este dinero, los fiscales mencionaron un automóvil deportivo Ferrari Roma 2024 y propiedades en Long Island, Nueva York, así como en Honolulu, que tienen un valor aproximado de 5,5 millones de euros.
También se detalló que, entre los lujosos obsequios que recibieron, se encontraban patos salados al estilo de Nanjing, preparados por el chef personal de un funcionario del gobierno chino y entregados a la casa de los padres de Sun.
Es importante destacar que la Gobernadora Hochul no enfrentó ningún cargo de irregularidad.
Su oficina despidió a Sun en marzo de 2023 tras descubrir evidencia de mala conducta, lo que llevó a reportar las acciones de Sun a las autoridades y a cooperar con la justicia a lo largo del proceso, según un portavoz de la gobernadora.
Este caso es uno de varios que han surgido en torno a la influencia extranjera en los gobiernos locales y estatales de EE. UU., evidenciando la preocupación por la seguridad nacional y la integridad de las instituciones políticas.
Las acusaciones de actuar como agentes extranjeros sin registrar se han vuelto cada vez más comunes a medida que las tensiones entre Estados Unidos y China aumentan.
La situación de Sun y Hu es un recordatorio de lo delicada que puede ser la intersección entre política, negocios y relaciones internacionales.
En las últimas décadas, ha habido un aumento en las investigaciones relacionadas con la corrupción y la influencia indebida en las decisiones governamentales.
Este nuevo escándalo llega en un momento crítico, donde la confianza en las instituciones se encuentra bajo un escrutinio intensificado por la opinión pública.
Con el surgimiento de nuevas tecnologías y el comercio internacional, la vigilancia sobre las actividades de funcionarios y sus conexiones con entidades extranjeras es cada vez más necesaria.
La forma en que se desarrollarán este tipo de casos en el futuro podría tener un impacto significativo en la política estadounidense y en las relaciones internacionales.