El Papa ha emitido una disculpa después de que medios italianos reportaran que durante una reunión privada con obispos mencionó que había 'demasiada mariconería' entre los que se entrenan para ser sacerdotes católicos, y que deberían ser excluidos.

Francisco habría hecho este comentario en una reunión a puerta cerrada con obispos al describir los colegios eclesiásticos como ya demasiado llenos de 'frociaggine', que se traduce como 'mariconería', cuando se planteó el tema de admitir hombres homosexuales a los seminarios.

La disculpa del Papa por utilizar un término vulgar para referirse a hombres homosexuales fue el último comentario que generó titulares sobre las enseñanzas de la Iglesia Católica sobre la homosexualidad.

El pontífice de 87 años habría utilizado un término ofensivo durante una reunión con más de 250 obispos la semana pasada, al expresar su oposición a que hombres homosexuales se unan a los colegios de formación para sacerdotes, incluso si se comprometieran al celibato.

El informe, publicado en el blog italiano Dagospia, y confirmado por los principales periódicos La Repubblica y Corriere della Sera, ha generado titulares en todo el mundo y provocó consternación tanto en grupos LGTBQ como en católicos.

Su comentario al parecer fue recibido con incredulidad por la audiencia.

Sin embargo, se afirma que fue claro que Francisco, que es argentino y hablaba en italiano, no era consciente de lo ofensiva que era la palabra en italiano.

La declaración del Vaticano no confirmó que haya utilizado la palabra pero se refirió a artículos de prensa.

Francisco ha sido descrito como alguien que a menudo habla de manera informal, hace chistes usando jerga y lenguaje 'subido de tono, a veces vulgar'. La pregunta de los obispos sobre la entrada de hombres homosexuales en los seminarios siguió a un debate sobre el tema en una reunión de obispos en noviembre en Asís, donde se acordó cambiar una regulación anterior emitida en 2005, que prohibía a los hombres entrar en los seminarios si practicaban la homosexualidad, tenían tendencias homosexualas 'profundamente arraigadas' o apoyaban la 'cultura gay'.

La Iglesia Católica ha enfrentado en repetidas ocasiones críticas y controversias en relación con su postura sobre la homosexualidad y la comunidad LGTBQ. A lo largo de la historia, la institución ha tenido que adaptarse a los cambios sociales y culturales para mantener su relevancia y credibilidad en la sociedad.

Las discusiones en torno a la inclusión de personas homosexuales en el clero han sido objeto de debate y división dentro de la Iglesia, reflejando las tensiones y contradicciones en su doctrina.

La disculpa del Papa por el uso de un lenguaje inapropiado resalta la sensibilidad y complejidad de los temas relacionados con la sexualidad y la identidad en el ámbito religioso, y subraya la necesidad de un diálogo abierto y respetuoso para abordar estas cuestiones en un mundo diverso y cambiante.