El Papa Francisco está llevando a cabo cambios revolucionarios en personal y políticas en la Iglesia Católica, en línea con su consejo de 'hacer un lío'. Con su visita a Portugal para la Jornada Mundial de la Juventud, está buscando solidificar los cambios necesarios para el siglo XXI y contar con la próxima generación de fieles y líderes para implementarlos. Además, está promoviendo un Sínodo en el Vaticano que se centrará en temas importantes como la inclusión de los católicos LGBTQ+ y las mujeres en la iglesia, dando voz y voto a las mujeres y los jóvenes por primera vez en la historia de la iglesia.

Durante su visita a Portugal para la Jornada Mundial de la Juventud, el #Papa Francisco está buscando solidificar los cambios que considera necesarios para hacer frente a los desafíos del siglo XXI.
En línea con su consejo de 'hacer un lío', está alentando a los jóvenes a sacudir las cosas en sus iglesias locales, incluso si esto contraría a sus obispos.
La Jornada Mundial de la Juventud, un evento internacional que fue iniciado por el Papa Juan Pablo II en 1986, se espera que atraiga a aproximadamente un millón de personas.
Será el primer evento de este tipo después de la pandemia, y el Papa Francisco tiene la intención de abordar temas como el cambio climático, la desigualdad social y la guerra en Ucrania.
Además de su visita a Portugal, el Papa Francisco está llevando a cabo una estrategia global para sentar las bases del futuro de la iglesia. Este octubre, se llevará a cabo un importante #Sínodo en el Vaticano en el que se discutirán temas controvertidos como la inclusión de los católicos LGBTQ+ y las mujeres en la iglesia.
Las mujeres y los jóvenes tendrán voz y voto en el Sínodo
Por primera vez en la historia de la iglesia, las mujeres y los jóvenes tendrán voz y voto en el Sínodo, junto con los obispos. La intención de esta inclusión es obtener una dirección clara sobre estas cuestiones importantes y permitir que todos los miembros de la iglesia participen en las decisiones.
El Papa Francisco está decidido a sentar las bases para una iglesia más inclusiva y abierta, y está contando con la próxima generación de fieles y líderes para llevar a cabo estos cambios.
A pesar de sus 86 años y de recuperarse de una cirugía intestinal, está acelerando su agenda de #reformas y asegurándose de que estos cambios sean duraderos.
En resumen, el Papa Francisco está tomando su propio consejo de 'hacer un lío' y está llevando a cabo cambios revolucionarios en la Iglesia Católica.
Su visita a Portugal para la #Jornada Mundial de la Juventud es solo una parte de su estrategia para solidificar los cambios necesarios para el siglo XXI.