El brote de mpox en África ha alcanzado cifras alarmantes con más de 500 muertes y un aumento del 160% en los casos, impulsando a la OMS a declarar una emergencia global.

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El reciente brote de mpox, conocido también como viruela símica, ha llevado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar una emergencia sanitaria global.

Este anuncio fue realizado en Londres, donde se detalló que el número de infectados ha alcanzado cifras alarmantes en el Congo y en otras partes de África, con más de 14,000 casos reportados hasta la fecha.

De acuerdo con la Agencia de Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de África, se han registrado más de 500 muertes, lo que representa un duro golpe para la salud pública en la región.

Este incremento en la mortalidad y morbilidad ha sido del 160% en casos y del 19% en muertes en comparación con el mismo periodo del año anterior.

La OMS ha expresado su preocupación, subrayando que la nueva variante del virus, que se está propagando, podría tener una tasa de letalidad que oscile entre el 3 y el 4 por ciento.

La situación es aún más complicada debido a la escasez de vacunas disponibles en el continente africano.

Hasta ahora, muy pocos dosis han llegado a las manos de los profesionales de la salud, lo que ha dificultado el control de la propagación del virus.

Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, enfatizó la necesidad de actuar de manera efectiva para evitar que la situación se agrave.

"Esto es algo que debería preocuparnos a todos... El potencial de propagación adicional dentro de África y más allá es muy preocupante", aseguró.


Desde el inicio del año, se han registrado casos de mpox en 13 países africanos.

Más del 96% de los contagios y muertes se han concentrado en el Congo, donde se observa un alarmante repunte de la enfermedad.

Salam Abdool Karim, experto en enfermedades infecciosas de Sudáfrica, señaló que la realidad actual pone en riesgo a muchas naciones vecinas a la región central de África, sugiriendo que la enfermedad podría extenderse aún más.

Históricamente, el mpox había permanecido relativamente controlado hasta el año 2022, cuando la OMS lo catalogó como emergencia global, específicamente en un brote que afectó a más de 70 países que anteriormente no habían reportado casos.

En ese entonces, la tasa de mortalidad fue notablemente más baja, con menos del 1% de las personas afectadas falleciendo debido a la enfermedad.

Michael Marks, profesor de medicina en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, propuso que la declaración de esta nueva emergencia en África podría justificar la necesidad de aumentar el apoyo y los recursos para controlar el brote.

La comunidad internacional se enfrenta a un desafío importante, y se necesitan medidas urgentes para contener la propagación del virus antes de que se convierta en una crisis aún mayor.