El ex primer ministro malasio Najib Razak está instando a los líderes en Kuala Lumpur a que impulsen la extradición del asesino convicto Sirul Azhar Umar desde Australia.

Najib sugiere brindar garantías al gobierno australiano de que Umar no será ejecutado si es extraditado.

Umar, de 51 años, fue uno de los 93 detenidos de inmigración liberados en Australia hace quince días debido a una decisión de la Corte Suprema que revocaba la detención indefinida de extranjeros que no podían ser deportados.

El ex guardaespaldas del primer ministro malasio escapó a Australia en 2015, justo antes de ser condenado por segunda vez y sentenciado a la horca por el infame asesinato de la modelo mongola y traductora gubernamental Altantuyaa Shaariibuu nueve años antes.

Ahora libre y viviendo en Canberra con su hijo de 23 años después de haber sido liberado del Centro de Detención de Inmigración de Villawood en Sydney, ha pedido a la comunidad que lo acepte, afirmando que él fue utilizado como chivo expiatorio por el asesinato y dejando entrever figuras poderosas en el trasfondo.

En una entrevista con Al Jazeera, dijo que le habían pagado 1 millón de ringgit malasios (325,000 euros) a través de su abogado por su silencio sobre quién ordenó el asesinato de la joven de 28 años Altantuyaa, quien había tenido una relación con el asesor político de Najib, Abdul Razak Baginda, y que había amenazado con revelar sobornos ilegales vinculados a un acuerdo de submarinos en el que había trabajado como traductora.

Estas afirmaciones han llevado a Najib, quien fue ministro de defensa responsable de la compra de submarinos de la clase Scorpene francesa en 2002, a intervenir desde la prisión de Kajang al sur de Kuala Lumpur, donde está cumpliendo una condena de 12 años por el escándalo de corrupción 1MDB de Malasia.

'Nuestro cliente solicita al gobierno de Malasia actual que se comprometa con las autoridades australianas con el objetivo de facilitar la extradición del señor Sirul a Malasia, asegurando una investigación exhaustiva sobre sus afirmaciones', dijo una declaración emitida por el abogado de Najib, Shafee Abdullah, en nombre de Najib.

'Para apoyar esto, nuestro cliente sugiere que el gobierno de Malasia pueda ofrecer garantías contra la imposición de la pena de muerte para facilitar el objetivo más amplio de la verdad y la justicia'.